Carmesí - BrightWin [ADAPTACIÓN]

XXVIII

Si Bright pensó que la noticia que le había dado su novio con esa hermosa sonrisa tan bonita y tan suya, estaba muy equivocado. Win y Luke hablaron un buen rato después de que éste último le contará a su yerno los planes que tenía de irse de la mansión. Ellos comprendían la importancia de que la familia Chiva-aree conservara el poder de la monarquía, ello les aseguraba la seguridad y protección porque nadie atentaría en contra ellos.

Ya que ahora, no solo eran tres hombres fuertes y poderosos los únicos integrantes de aquella prestigiosa familia, debían cuidar y proteger a la hermosa bebé que había llegado a sus vidas. La vida de la pequeña princesa era lo más importante para Bright y para Win en esos momentos y la iban a resguardar de todo y contra todo.

Así que, bajo esa premisa, Win le había dicho a Luke que si su compañero se negaba a tomar el cargo de rey, él lo tomaría. Al principio Luke estuvo demasiado sorprendido con la decisión que tomó el joven vampiro, pues aquello no era una labor fácil, sin embargo, conocía muy bien a Win y sabía que él haría un papel extraordinario como nuevo monarca del clan.

No había tanto problema con que Win asumiera el reinado en realidad, tan solo debían realizar un pequeñísimo "trámite", el cual consistía en casarse con Bright para que de manera oficial portara el apellido Chiva-aree, y de esa manera no existiera ningún inconveniente con los estatus que regían a los vampiros. Win dijo que eso era lo de menos, se casaba con Bright y listo, después de todo ya eran una pareja, vivían juntos y tenían una hija en común.

- ¿Me estás diciendo que tú eres el nuevo rey de nuestra raza? - cuestionó Bright sin poder creer todavía las palabras de su novio.

- Sí, eso mismo te acabo de decir - confirmó Win.

- ¿Por qué? - preguntó Bright quién aún tenía entre sus brazos a Marisel.

- ¿Cómo qué por qué? Has rechazado tu puesto, entonces yo tomé la decisión de ocupar tu lugar - le dijo el menor con seriedad - solo necesitamos casarnos para que yo pueda llevar tu apellido oficialmente y no tenga problemas con mi nombramiento.

Win... Su Winnie... su impredecible OMEGA había tomado la decisión de ser el principal guía de una raza, que si bien era pequeña también era sumamente poderosa. Y encima decía, así tan a la ligera que nada más debían unirse en matrimonio para su nombramiento se diera sin problema alguno, pensó que estaba bromeando pero al ver su determinación supo que hablaba muy en serio.

- ¿Cómo es que has llegado a ese acuerdo con mi padre? - cuestionó Bright creyendo haber encontrado un indicio de que Win estaba mintiendo y todo lo que decía era para persuadirlo de tomar el trono en sus manos - mi padre y tú ni siquiera se hablan, salvo las pocas palabras que se dirigen cuando él pasa tiempo con Marisel, ¿Y ahora me dices que te ha cedido su lugar así como si nada?

- Luke y yo hemos hecho las paces, y aunque le he pedido que se quede con nosotros, dice que necesita irse, al menos por un tiempo.

Ese día, Bright se estaba llevando muchas sorpresas, primero enterarse de que su novio era su rey, que debía casarse con él y que encima había olvidado todo el resentimiento hacía su padre y lo había perdonado. Aquello era lo conmovía su corazón pues deseaba con que más todas sus fuerzas que tanto Luke como Win volvieran a quererse y estuvieran unidos como lo habían hecho desde el principio, sin importarle que conspiraran en su contra, Bright también quería que su novio viera a su padre como el suyo propio.

-¿Entonces las cosas han mejorado entre ustedes? - preguntó con reserva.

- Sí, ahora tu padre también es el mío.

- Siempre lo ha sido, mi bello conejito - Bright se acercó a él y le dio un beso en la frente - ¿No tienes por ahí guardada alguna otra buena noticia?