Mariliendres

Capítulo 1

Casa de verano de los Wilson. Zahara de los Atunes. Verano 2006.

En el amplio jardín de la casa de verano de la famosa familia viticultora, en forma de corro se encontraban sentadas las seis protagonistas de nuestra historia. Desde fuera, para los trabajadores de la familia o algún miembro de la misma, podría parecer que estaban jugando a las cartas o a cualquier otro juego de mesa. En cambio, las seis amigas estaban terminando de completar la cápsula del tiempo que estaban dispuestas a enterrar en ese jardín donde tan buenos momentos pasaban desde que se conocieran en las playas de Zahara hace ya algunos años.

Con delicadeza cada una de ellas había ido colocando su objeto más preciado junto con una carta para su yo de 30 años, que después cerraron con un candado para que solo ellas pudieran ver lo que había dentro. Lo hacían así sobre todo por la existencia de algún que otro hermano curioso que las pudiera atormentar con lo que habían escrito.

La caja había sido decorada por Luz y en la tapadera se podía leer "Cápsula de Las Mariliendres", que es como se hacían llamar. Ainhoa fue la encargada de cerrar la caja con llave, llave con la que se quedó Maca por ser considerada una de las más responsables dentro del grupo. Pepa y Mapi se encargaron de cavar el hoyo, tras uno de los pinos más escondidos que había en el jardín mientras que Luz vigilaba que no las pillaran con las manos en la masa. Luisita fue la que se ocupó de colocar la caja en su hueco de un modo muy ceremonioso, alegando que ese momento tan especial le tocaba a ella porque había sido su idea, tras lo que cada una se encargó de tirar una pala de tierra para cubrir la caja antes de que Pepa y Mapi volvieran a taparlo con lo que quedaba dejándolo lo más parecido a como estaba antes, con un resultado pésimo.

- Pues ya estaría - dijo Ainhoa tras ver a sus amigas dar los últimos golpes con la pala sobre el montículo

Durante unos minutos, todas se quedaron mirando ese montículo de tierra que además de albergar una parte importante de ellas también guardaba los sueños y deseos de aquellas cuatro amigas para un futuro que aún veían lejano.

- ¿Y ahora qué? - preguntó Luz mirando a sus amigas y rompiendo la solemnidad del momento

- ¿Otra vez? Joder, no te enteras - resopla Luisita mirando a su amiga, a la que se le había olvidado ya las veces que le había explicado el proceso - se desentierra cuando ...

- No, no - la interrumpe dejándole claro que la había entendido - me refiero a ¿Qué vamos a hacer ahora? Es pronto todavía

- Son las siete - dice Maca tras comprobar la hora en su reloj

- ¿Os hacen unas pipas en el faro? - pregunta Pepa - es más creo que traigo las cartas en la mochila

- Guay - Mapi apoya a su amiga - y después podemos ir a por unas pizzas a lo de Cristóbal

- Si, y nos las comemos en el cine de verano - dijo asintiendo Ainhoa - creo que hoy ponían Grease

Se miraron entre sí y dieron el visto bueno a la idea, que habían tejido entre todas, con un asentimiento de cabeza. Y con otro gesto de complicidad entre ambas, no tardaron más de un minuto en salir de la casa para ir hacia el faro.

- Os vuelvo a recordar que nada de abrirla antes del 30 cumpleaños de Luz - Luisita insistía a sus amigas en su camino al faro - y ni se os ocurra presionar a Maca para que lo haga - se giró para advertirles a Mapi y Pepa que iban imitándola por detrás

- Que si, pesada - le contestó Mapi - si lo he jurado por ... - como si lo de la promesa fuera un botón activador se acordó de otra promesa que hizo hace unos días - hostia, me tengo que ir - dijo caminando hacia atrás