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⟩ Butters Stotch x FemReader + MaleReader
Sólo esperabas a que Garrison terminará de nombrar las parejas para cuidar al huevo, esperabas que no te tocará con alguien irresponsable o con Cartman.
Tu pareja había sido Butters, así que respiraste tranquila, acercaron sus sillas para ponerse juntos, les entregaron el huevo con la firma, para que no lo cambiarán.
Tomaste tu lapizera para sacar un marcador y dibujarle ojos, sacaste un poco de estambre amarillo, para simular el cabello rubio de tu compañero.
Llevabas estambre siempre por que te gustaba tejer , era algo relajante, además de una actividad que realizabas con tu abuela quien te enseñó.
Miraste al rubio.
───Supongo que ya está
El adorable rubio negó con la cabeza levemente y sacó un color de su mochila, coloreando el ojo del mismo color que el tuyo.
───Y-ya ésta ───mencionó con pena jugando con sus dedos de manera nerviosa.
───Esta muy lindo, ¿Quieres que sea una niña o un niño? ───pregunto la castaña mirando al rubio.
───Una niña esta bien───mencionó pensando en que tenía un poco de ropa de muñecas, muy utlil para este proyecto escolar.
Asentiste sacando unos cuantas tiras de estambre y pegarlas en el huevo como dos coletitas, era un huevo con cabello rubio, ojos [c/o] y unos moñitos negros por que si, por que a su mami le gusta.
Sólo una semana cuidando un huevo, fácil y como el profesor dijo "no quieren un bebé muerto", además de la mala nota.
Los primeros días donde le tocaba a la madre de la pequeña Mary, [nombrada así por butters] llevarla a casa para dormir, fueron momentos muy lindos para la niña, con sumo cuidado trataba al pequeño huevo, con un esmero envidiable por el hecho de pensar que era suyo y de Leo, aun no entendía muy bien ese sutil sentimiento agradable que se albergaba en su pecho brindandole calidez y uno que otro pensamiento que surgía de su cabeza al imaginar un futuro junto al rubio, rápidamente apartaba esos pensamientos de su mente por que sus mejillas se tornaban rojas, aun era muy pequeña o eso era lo que le decían sus padres.
Como de costumbre la pequeña llegó a la escuela, gracias a que sus padres la llevaban, bajo del auto encontrándose a sus emocionadas amigas y sus hijos huevo.
───Buenos días Wendy───saludo cordialmente la castaña a la pelinegra de boina Rosada.
───Oh, hola ______───respondió de igual manera la azabache, acercándose más a su querida amiga de cabello suelto.
───Tu hija, ¡que linda! ¿cómo se llama?───cuestionó wendy con notoria emoción en su voz.
