Capitulo II

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POV LUZ

Ya había pasado una semana desde que tengo mi tobillo enyesado, había algo bueno de esto y esque me dio esta incapacidad, y fue que mi madre en forma de enseñarme lo que costaba ganarse el dinero me hizo trabajar de niñera en mis ratos libres, y pues con una pierna así pocas personas querían dejar a sus hijos a cargo conmigo, tenía mi perfil en una cuenta de niñeras y evidentemente mi madre era quien la administraba.

Ese día me levanté y arreglé para dirigirme a clases, desde mi fractura Boscha se ofreció para llevarme todos los días  a la Universidad, éramos amigas desde muy pequeñas, ella  siempre fue la hermana que nunca tuve, mi mamá Camila la odiaba y amaba a la vez, mientras mi mamá Eda la amo desde el primer día al ser un desastre igual que ella. Cuando terminamos el colegio ella dijo que ya no quería estudiar así que le pidió trabajo a mi mamá en su bar, ella siempre solía decir "Que mejor futuro puedo tener, trabajo donde no me toca madrugar, cuando quiero consigo bebidas gratis y mujeres por montones". Esa era mi amiga, amaba emborracharse y cada día tenía una mujer diferente en su cama.

"Hola.. ¿Estas lista?" Dijo Boscha entrando a mi cuarto, sin siquiera golpear la puerta, pero entre las dos no había nada que esconderse, me puse mi camisa y ella me alcanzó mis muletas.

"Si, ahora estoy lista" Le dije con una sonrisa.

"Perfecto, entonces vamos". Ella recogió mi maleta y nos dirigimos a la Universidad.

Cuando llegamos ella puso mala cara, la misma que ponía cada que veía a mi novia, era porque nunca se habían llevado bien, era una pena, yo sentia que la quería, llevamos juntas alrededor de un año, Skara una chica linda la cual me gusta mucho, pero a Boscha lo que no le gusta es que sea demasiado celosa e intensa.

"Hola cariño" Dijo ella, acercándose a nosotras dándome un beso un poco intenso ignorando el hecho de que Bischa estaba ahí, fue un momento incomodo como siempre que estamos las tres juntas.

"Hola" le dije de manera simple.

"Muy bien Luci, estas sana y salva en tu uni, así que me voy" Dijo Bo rompiendo el silencio que se hizo presente mientras me daba mi mochila.

"Gracias Bo, nos vemos mañana" Le dije con una sonrisa.

"Por supuesto dulzura" Me respondio sabiendo que Skara odia que me llame así, yo solo asenti con la cabeza.

"Bueno, entonces a clases" Dijo Skara.

Ese día tenía fundamentos de política, clase que no estaba con Skara pero si con Augustus un amigo de piel morena, un poco más bajo que yo y de cabello chino negro.

"Hola" Le dije tomando asiento a su lado.

"Hola Luz" Respondio el con una sonrisa en su rostro "¿Como vas con tu lesión?"

"Bueno, pues es horrible, pero por el momento no e tenido que ser niñera de nadie" Le dije mientras terminaba de sacar mi cuaderno para tomar apuntes.

La clase era muy buena, cada día me daba cuenta de que esto era lo que me gustaba, cuando salí de clases Skara ya estaba esperándome afuera esperando por mi.

"¿Como te fue cariño?". Pregunto ella mientras tomaba mi mochila, era muy atenta.

"Bien esta clase en serio me gusta, sabes creo qu..." En un momento a otro mi habla fue bloqueada por sus labios contra los míos, dándome un  beso un tanto posesivo, además en este momento los demás estaban saliendo de clases y a mi jamás me han gustado las demostraciones así en público, por lo que rápidamente la retiré y la mala cara no se hizo esperar.

"Esto es el como, siempre haces lo mismo" Dijo Skara mientras nos dirigíamos a comer algo.

"Tu sabes lo que pienso de las demostraciones en público" Le dije, ella lo sabía siempre e sido así, no se porque esperaba que cambiara de un momento a otro.

Nos sentamos en un silencio incómodo a comer"¿Sabes?, aveces pienso que no soy tan importante para ti" La verdad hubiera preferido permanecer en silencio antes de iniciar una pelea así como ella.

"Tu me conoces, no sé porque esperas que cambie" Le dije con cierto tono de disgusto.

"¿Pero que tiene de malo darle un beso a tu novia en publico?" Dijo levantando la voz, en serio odiaba que hiciera esto.

"Primero bajale al tono, y segundo el no quiere decir que no seas importante para mi" Le dije mirando a los lados para ver que tanta gente miraba la discusión.

"¿Sabes que?, creo que es mejor terminar, somos muy diferentes y no te importa" Me respndio y sus lágrimas empezaron s rodar por sus mejillas.

"No digas eso, te estoy diciendo que eres importante" Dije tomando una de sus manos la cual rápidamente quitó, "Deberías demostrarlo más seguido" y con eso se levanto y se fue de la mesa.

No quise y no podía seguirla, sentí una mano en mi hombro, volteé la cabeza y era Gus dándome una sonrisa triste, al parecer lo había visto todo.

"¿Otro ataque de celos" Pregunto el tomando asiento a mi lado  y tomando una de las papas de mi plato, "Algo asi" La verdad no quería profundizar en el tema por lo cual el no hizo más preguntas, ya que me conocía bien y sabía cuando quería hablar y cuando no, terminamos de comer y me dirigí a mi segunda clase.

Mis clases habían terminado, intenté llamar a Skara pero su celular siempre manda a buzón de mensajes y preferí ya no insistir, "Te llevo a casa" Pregunto Gus mientras tomaba su maleta y la mía poniéndolas en su espalda, " Gracias" le respondí y nos dirigimos a mi casa.

Cuando llegue mi madre me esperaba con una sonrisa en su cara.

"Hola cariño" me respondió y me llevo directamente a la cocina.

"¿Y mami Eda?" Pregunte al no verla ahí.

"Le tocaba hacer el súper" Respondio de manera simple y sencilla.

"Ok, esta bien ¿A que debemos tanta alegría?" Le dije mientras ella pondría una taza de té al frente de mi.

"Bueno cariño, resulta que hoy llamaron para tu servicio como niñera" Mencionó emocionada.

"Pero mamá, tengo un tobillo roto" ¿Como esperan que cuide a un niño con un tobillo roto?

"Por favor Luz, aún así puedes moverte, no es tan grave" Dijo sentándose a mi lado, "Además si quieres el viaje a América del sur aún debes ahorra mucho dinero" Si, ella tenía un punto pero era un niño y yo tenía un tobillo roto.

"Además esa persona te pagará bien ya que son gemelos" En ese momento casi me ahogo con el té.

"Pero mamá, apenas y puedo cuidar a un niño, ¿Y ahora quieres que cuide dos?"  Le respondí, en ese momento mi genio empezaba a salirse de mis casillas.

"Luz, la mamá de los niños dijo que eran muy juiciosos, además se oía muy necesitada" y ahí está mi mamá queriendo salvar el día.

Subí a mi habitación diciéndole a mi mamá que pensaría en la oferta, yo seguía pensando que ra muy riesgoso, no solo para mí sino también para los niños,  mi madre me dio algunos detalles tal y como; son niños de seis años, que comían solos, iban al baño por ellos mismos, y que yo solo debía estar al pendiente de sus tareas en las tardes, puesto que había una ama de llaves que se encargaba de sus comidas al final me pregunté "¿Que tan malo puede ser?" Igual tengo un fin de semana para pensarlo.

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