A continuación, la lista de prioridades importantes de Victoria:
1. Conseguir una beca deportiva para Stanford.
2. Actualizar frecuentemente su lista de récords personales (sobre todo en los 200 metros pecho, la única prueba que lleva más de dos meses sin superarse).
3. Mantener alto el espíritu de su equipo en estos tiempos de crisis.
4. Hacer que el Director entienda de UNA JODIDA VEZ POR TODAS QUE LOS TONTOS DEL EQUIPO DE POLO ACUÁTICO NO SON TAN IMPORTANTES O GLORIOSOS COMO SIEMPRE LOS HA HECHO VER.
Victoria está enojada. No, no, borra eso; hay que buscar un mejor adjetivo que realmente describa el sentimiento.
Victoria está cabreada. De hecho, ella ha estado cabreada por años. Ser capitana del equipo de natación te lleva hasta ese punto de inflexión, sobre todo cuando sabes que tu equipo tiene el talento, pero no el reconocimiento o, mejor dicho, el presupuesto que merecen.
¿Los culpables? El director Cage y su insana afición por el equipo de polo acuático.
Sí, sí, sí, puede que los chicos de polo se hayan ganado su buena ración del pastel, pero, ¿qué hay del equipo de natación? Ella podría muy bien enseñarle la larga lista de gente talentosa con récords estatales y aun así, la respuesta sobre el presupuesto siempre será la misma: «Ellos han estado invictos durante cuatro años consecutivos. Tal vez deberías promover el espíritu deportivo y alegrarte por sus logros, en vez de venir a intentar quitarles lo que se han ganado».
¡Ja! Lo siento, pero entre el equipo de natación y polo acuático, la paz nunca fue una opción. Para Vix, de hecho, es momento de tomar medidas estrictas; hay que hacerle frente al enemigo antes que sea demasiado tarde.
Solo que... nunca pensó que «hacerle frente al enemigo» sería explotar contra Bass Miller (su archienemigo y capitán del equipo de polo) bajo los efectos del alcohol, en una fiesta, y que todo terminara en una ridícula competencia con un jugoso premio que podría fácilmente resolver todos sus problemas.
Sin embargo, no hay vuelta atrás. Es todo o nada, y ni la determinación de Victoria, ni el orgullo de Bass están dispuestos a perder.
Eso, al menos que... las percepciones cambien, los sentimientos se interpongan y una enemistad casi bíblica se vea liada por la última —y peor— cosa que podrías hacer con tu enemigo: enamorarte.
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Operación Victoria | Próximamente
Novela JuvenilVictoria está enojada. No, no, borra eso; hay que buscar un mejor adjetivo que realmente describa el sentimiento. Victoria está cabreada. De hecho, ella ha estado cabreada por años. Ser capitana del equipo de natación te lleva hasta ese punto de i...