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Planeta Calluvia
—Su Alteza el Príncipe Won'ngh'veighli del Tercer Gran Clan desea verte, Su Alteza —anunció Borg'gorn.
Minghao levantó la vista del modelo 3D de la Tierra. Se suponía que estaba actualizando la base de datos con la nueva información que había aprendido sobre los humanos, pero en vez de eso, había terminado mirando el modelo 3D del planeta durante aproximadamente media hora. O mejor dicho, en una pequeña isla en él.
—Déjalo entrar —dijo Minghao con retraso, enderezándose y mirando a la puerta. Él no podía esperar a ver a Wonwoo. Tenían la misma edad y habían crecido juntos. Minghao siempre lo había considerado su mejor amigo. Wonwoo también iba a ser familia en menos de dos años cuando cumpliera veinticinco años y su vínculo infantil con el hermano de Minghao se convirtió en un vínculo matrimonial. Cuando Minghao había regresado de la Tierra, se había decepcionado al enterarse de que Wonwoo estaba fuera del planeta y no regresaría por un tiempo. Quería hablar con alguien en quien pudiera confiar plenamente y Wonwoo era la única persona en la que confiaba para no juzgarlo.
Sonrió cuando la puerta se abrió y Wonwoo entró, tan elegante como siempre.
Los ojos verdes de Wonwoo se iluminaron cuando vio a Minghao.
—Minght —dijo Wonwoo, extendiendo su mente hacia la de Minghao. Suprimiendo la necesidad de abrazar a su amigo, Minghao lo abrazó telepáticamente. La mente de Wonwoo siempre se había sentido tan plateada como el cabello de Wonwoo, con un borde familiar de emoción e impaciencia. Wonwoo siempre estaba en movimiento, una mariposa social a la que le gustaba conocer gente nueva y hacer muchos amigos. Si amaba, amaba ferozmente. Si odiaba, odiaba con la misma fiereza. Siendo bastante moderado, Minghao siempre había pensado que debía ser agotador ser Wonwoo, pero últimamente... lo entendía mejor. Mucho mejor.
—Estaba empezando a pensar que habías sido secuestrado por los bárbaros en Sol III —dijo Wonwoo con una sonrisa.
Minghao frunció el ceño y le dio un golpe telepático.
—Los humanos no son bárbaros. No seas un snob. Y ya he regresado hace años. No es mi culpa que estuvieras fuera del planeta.
Wonwoo arrugó la nariz y sonrió tímidamente.
—Ugh, estaba siendo un snob. Menos mal que te tengo para decirme cuando actúo con esnobismo y alto nivel.
—Mingyu debe haberte contagiado —dijo Minghao con una pequeña sonrisa.
Ahora fue el turno de Wonwoo de darle un golpe telepático.
—Ni siquiera bromees al respecto —dijo con el ceño fruncido, dejándose caer en el sofá junto a Minghao—. Tienes permiso para matarme el día que comience a actuar como Mingyu.
—Lo siento —dijo Minghao, sabiendo que era un tema delicado para Wonwoo. Palmeó el hombro de Wonwoo—. Él no es un monstruo, ya sabes.
