La vida de unos hermanos que tienen muchos problemas familiares y una vida muy complicada pero de narcotraficantes a militares, y podrían ser los mejores de la milicia, pero ¿Qué pasaría si se enteraran de su pasado o de sus verdaderas identidades...
¡Jason puso una bomba en mi abdomen!, ¡esta loco!, esa es la pieza de metal que siento en la cicatriz. Ahora qué...
Jason: - Si intentas sacarlo, ¡BOOM! -
Liam: - Estas demente -
Jason: - Soy vengativo -
Alan: - Ya es suficiente, acabamos tu estúpida misión y no liberas -
Jason: - Puede -
Ihan: - No es hora de juegos -
Sam: - Desactiva esta cosa -
Jason: - Cuando acabes el trabajo, ya tengo sus atuendos - Llegaron unos chicas con 3 trajes negros y un ¿¡VESTIDO!?, Quiere que use esa cosa horrenda y super incómoda, y no solo eso, ¿¡TACONES!?. Acaso podría empeorar.
Jason: - Por cierto, Alan y Samantha son esposos -
Sam: - Estás de broma -
Alan: - Ni locos -
Jason: - Ya pueden cambiarse, y dentro de sus atuendos tiene sus identidades, disfruten -
Esto definitivamente es una pesadilla, no puedo cree lo que está pasando, tengo que ponerme un vestido rojo y muy pegado a mi cuerpo con tacones altos y rojos, y lo peor Alan es mi supuesto esposo, creo que sería buen momento para renunciar, mi identidad dice que soy la condesa Beatrice Borromeo y Alan es Pierre Casiraghi, es una broma, que hace el Conde de Italia en Estados Unidos -
Ihan: - Mundo llamando a Samantha -
Los chicos ya estaban cambiados solo falto yo más o menos el vestido era así:
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La verdad, me incómoda bastante, pero creo que me gusta, jamás pensé que un vestido me agradaría, ahora solo falta completar la misión.
Jason: - Su transporte está listo, cuando tengan al presidente, habrá un helicóptero esperando en el techo, no fallen si no quieren explotar -
Sam: - Bien chicos, vámonos, no aguanto ni un minuto más, cerca de el -
Liam: - Estoy contigo Sam -
Subimos a un auto muy caro, y lo mejor es que yo manejaba, de eso no me podía quejar, el auto era negro y tenia justo cuatro asientos, ahora entiendo porque regresamos en helicóptero, estábamos cerca de la casa presidencial, así que antes de llegar guardemos nuestras armas, los chicos la tenían fácil, yo tuve que ponerla en mi tobillo con unos cuantos cuchillos, llegamos a la Gala donde había mucha gente, nosotros teníamos una mesa reservada con el presidente y unos cuantos ministros mas, entramos sin problema y nos dirigieron a la mesa, el plan era poner un suero en la comida del presidente para que se sintiera mal y Alan lo acompañaría al lavabo, nos comunicaríamos con unos audífonos que Jason nos dio, y después Alan lo dormiría y mis hermanos lo ayudarían a llévalo al helicóptero mientras yo evito que los guardias del presidente estén cerca, creo que va a funcionar.
Sam: - Señor Presidente, que alegría verlo - dije mientras saludamos con las manos.
Presidente: - Conde, Condesa, mucho gusto -
Sam: - Gracias por la invitación - Aunque sea robada , jeje.
Presidente: - Por favor tomen asiento - Por suerte, yo me sentaba al frente del presidente.
Todos se sentaron y empezó la entrada, la verdad es que no me gusta mucho la comida de luego, prefiero una pizza viendo una película, pero aquí vamos.
Presidente: - Y bien, ¿Cómo se conocieron? -
Rayos, aviamos practicado todo excepto preguntas personales, hasta nos aprendimos la economía de Italia, pero no esto.
Alan: - En un evento -
Sam: - Si, era una gala para recaudar fondos, para los orfanatos -
Presidente: - Que bien, mi esposa y yo nos conocimos en una feria, y cuando a vi supe que era la indicada - Luego de eso beso a su esposa - Ustedes también se ven muy unidos, regálenos un beso -
¡QUE!, el residente nos pidió que nos besemos, esta loco... Nos miramos Alan y yo, los dos teníamos cara de espantados nos acercamos y antes de llegar a los labios.
