Capitulo diez

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-10-

Me acerco a Sam que esta bailando muy apasionadamente con el mismo chico de antes, creo que su nombre es Henry o Harold, algo así.

-¡Audrey! Sam me jala del brazo dejando al chico de lado, y me da un abrazo extremadamente apretado-¡Te extrañe, tanto!

Sam me soltó. La noche continua y termino bailando con un desconocido mientras Sam baila con el amigo de dicho desconocido.

Y no solo eso.

Sam no se conformaba con los tragos que ya había tomado, oh no, ella ordeno muchos más , y los chicos con los que bailábamos no invitan los tragos.

Si supieran que la familia de Sam , son los dueños.

-Toma , bebe algo-El chico con el que bailaba, me tendió un vaso-

Lo cogí sin siquiera detenerme a ver lo que era. Sentía la garganta seca de tanto bailar. Después de beber todo el contenido abrí los ojos. Y vi como Noah bajaba los escalones, luciendo para nada feliz, con un chico castaño, detrás.

-¡Revisa, el vaso!-le grito Noah al castaño de su lado, una vez que esta llega donde nosotros-

Mire a Sam y a ella también le habían invitado un trago, iba a protestar pero sentí como Noah me arrebataba el vaso de las manos, y su amigo hacia lo mismo con el vaso de Sam.

-Tienen droga-le afirmo el castaño a Noah-

Mierda.

En cuanto dijo esas palabras, sentí miedo. Él pelinegro cogió al tipo por la camiseta, hasta casi levantarlo del suelo.

-¿Qué carajos, les has echado?-le pregunto zarandeándolo con fuerza-¡Contéstame!

-Burundanga-dijo el chico completamente horrorizado-

No puede ser.

Silvia me había advertido de eso, esa era la droga que utilizaban los imbéciles para violar a las chicas. Es incolora e indolora y por eso se camuflaba tan bien en la bebida.

Narra Noah:

El solo hecho de pensar en lo que podría haber pasado , me nublo la mente ¿Qué clase de imbécil era capaz de hacerle eso a una chica? .Lo golpeé tantas veces que perdí la cuenta, mis puños terminaron hecho mierda, pero lo valió.

-Noah...-me hablo Audrey, detuve el puño antes de volver a estamparlo en la cara de aquel idiota-Tu y todos tus amigos tienen prohibido la entrada a este lugar-le advertí al sujeto-

-¿Quién dice?-aquel imbécil sonrió, con la sangre entre sus dientes-

-¡El jodido dueño del club!-le pegué por ultima vez –

El muy idiota se fue tambaleando y sangrado , junto a su amigo. Liam -mi mejor amigo-También le había dado su merecido a ese idiota.

Me volví hacia Audrey y Sam, ambas estaban completamente aterrorizadas. Algo se movió en mi interior cuando vi aquella expresión. Maldita sea, nadie se merecía eso. Tengo dos hermanas , que trato de cuidar todo el tiempo, justamente por este tipo de situaciones.

Con un gesto Liam, ayudo a mi hermana y la llevo hacia  la salida. Me aproxime hacia Audrey, estaba temblando y podía notar por su expresión que estaba asustada.

-¿Qué efectos tienes esa droga?-me pregunto con voz temblorosa-

-Vamos , te llevare al auto-dije ignorando su pregunta y cubriéndola con mi chaqueta-

Se apoyo en mi, y en cuanto llegamos hasta mi auto, abrí la puerta de atrás. Ya que mi hermana estaba sentada adelante, le entregue las llaves de mi auto a Liam, me subí atrás con Audrey, y el auto empezó a andar.

-¿Como te sientes?-le pregunté-

-Tengo calor-note como los parpados, habían empezado a pesarle-Noah, mis ojos se están cerrando-y se apoyo en mi hombro-

-Estarás bien-intente calmarla, pasando mi brazo por su hombro-

Vi, a mi hermana y ella ya estaba dormida, en el asiento de adelante, supongo que cada cuerpo reacciona diferente a la droga. Volví a ver a Audrey y ella parecía batallar por no quedarse dormida, sus mejillas estaban rojas y su pelo había comenzado a pegarse en su frente , intente apartárselo.

Ahora solo quedaba esperar que tolerancia tenia Audrey a las drogas.

A TRAVES DE TUS OJOS | En proceso©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora