III

30 5 3
                                    

Hoy

Hoy te miré después de un año sin encontrarnos, hoy te escuché reir otra vez luego de que silenciaste ante mis reclamos.

Hoy sentí el calor de tus manos nuevamente, saboreé la dulsura de tus tiernos labios rosados, no imaginé que seguirían siendo igual de mágicos.

Ojalá pudieras leer esto, apuesto a que te harían sonrojar mis palabras y yo me echaría a reir por lo hermoso que lucirías.

Ojalá... que pudieras estar aquí frente a mi, no solo en mis recuerdos ni en mis sueños como hoy.

El soñarte y despertar sabiendo que no eres palpable en mi realidad me duele más que el sueño mismo.

Extraño tus abrazos, tus besos en la frente, tu rostro joven y lleno de ilusiones. Antes de irte, tu juventud ya había dejado tus pupilas, parecías un adulto cansado aunque apenas rosaste los veinte.

Siempre me pregunto qué pasaba por tu mente minutos antes de tu partida, hoy al reencontrate me volví a cuestionar si lo que querías si era dejar atrás la vida.

No lo entiendo, eras todo un valiente, ¿por qué el destino en aferró a dejarte desamparado y ya no te ayudó a ser fuerte.

Hoy te miré después de un año sin encontrarnos quizás porque estoy mas cerca de aceptar que no estas ya entre los vivos.

Qué triste me hace sentir esto... el estar consciente de que hace unos ayeres yo podia estar seguro de que estabas ahí... y ahora solo aseguro que nuestro romance fue una parte hermosa de mi libro del pasado.






Hk~*

La nota del silencio ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora