My Psyxhologist 🥀💕 {HyunMin}

06

- Jisung - me sentí sofocado -. Jisung, diablos, ¿Qué hago? Felix no va a creer lo que le diga.

- Seungmin, tranquilo - agarró mis muñecas, alejándolas de cualquier parte de mi cuerpo -. Te estás estresando innecesariamente, trata de mantener la tranquilidad.

- Jisung, no - me solté del agarre, me presioné contra la pared -. Esto no es bueno, necesito una solución. Diablos, Kim, ¿Por qué eres así?

- Seungmin, para.

Jisung volvió a sujetar mis muñecas, ya que comenzaba a arañar frenéticamente partes de mi cuerpo por el estrés. Tiró de mí y me sentó en el sofá, después se situó sobre mí, no me importó.
Mi respiración comenzaba a volverse pesada, sentía que mis pulmones dejaban de funcionar, y comencé a hiperventilar.
Jisung agarró mis dos manos con una de sus pequeñas manos, y la otra la colocó en mi pecho.

- Seungmin, inhala y exhala, lentamente - ordenó -.

Después de que sintiera que no tenía salvación, encontré las palabras de Jisung, ellas me ayudaron. Comencé a inhalar y exhalar lo más tranquilo que pude, y aunque a veces me frustraba, Jisung mantuvo paciencia hasta que respiré con normalidad, nuevamente. Entonces, rodeó sus brazos al rededor de mi cuerpo.

- Siento que estés pasando esto - dijo en un susurro apenas audible para mí -. No lo hagas solo.

- ¿Todo bien? No lo comprendo.

- Minho - se separó, me miró a los ojos -. Él me dijo lo que pasaba contigo - parecía aterrorizado por mi reacción -.

- Oh, está bien. Gracias - le di un leve apretón en el antebrazo -.

- Te puedo entregar mi número en este momento - arrebató mi teléfono, comenzó a teclear -, así podrás llamar a alguien que no sea Felix si lo necesitas - sonrió -.

- Jisung - clavé mis ojos en los suyos -, ¿Por qué haces esto?

- Mm, sé que no te conozco desde hace mucho, pero conozco a Felix. Él siempre ha sido un tanto "especial", no tiene mucha paciencia. Sé que tú ánimo no es bueno, quiero que podamos llevar un poco mejor esta amistad, y quiero ayudarte.

- Oh, gracias, Jisung. Realmente aprecio todo lo que haces por mí, a pesar de no conocerme.

- Sin problema - sonrió, se levantó y se dirigió a la puerta -. Voy a volver, o notarán que me fuí, si quieres venir, avísame - sonrió, nuevamente -.

- De acuerdo - le devolví la sonrisa -. Gracias, Jisung.

- Sin problema.

Sonrió una última vez y se despidió, desapareciendo por la puerta.
Miré mis manos y suspiré, decidido a ir a dormir.

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Me desperté por la alarma, recién comenzaba a sonar. Froté mis ojos con mis manos y me levanté.
Cambié mi pijama por un traje gris claro, una camisa blanca y unos zapatos negros. Acomodé mi cabello y desayuné algo. Después, lavé mi cara y mis dientes, cogí las llaves y salí.
Felix no estaba en casa, así que supuse que ya estaba trabajando.
Me dirigí en coche hasta las afueras de la ciudad, ya que me habían mandado allí por un servicio.
Llegué y me sorprendí al ver a dos pequeños niños sentados en las escaleras de la casa. Uno de ellos parecía deprimido, el otro estaba realmente feliz.
La escena me apenó un poco, y una mujer de edad media apareció.

- Buenos días - saludó -. ¿Es usted Kim?

- En efecto - hice una reverencia -. ¿En qué puedo ayudarla?