A partir de hoy

109 8 5
                                    

Ha pasado un año desde la muerte de Rick, pero Mariann, Daryl y Michonne no se han rendido, todos los días van en busca de algo, una pista, un rastro, o en el peor de los casos, su cuerpo.
Realmente nunca encontraron algo que pudiera decirles si está vivo o muerto, sólo habían encontrado su revólver que siempre llevaba con él pero nada más, por lo que el ambiente de desilusión en la búsqueda aumentaba cada día más.
Daryl era el más desilusionado, y aunque Mariann intentaba motivarlo cada día, la situación entre la pareja se estaba tornando más difícil, pues Daryl volvió poco a poco a ser el hombre silencioso y cerrado que Mariann alguna vez había conocido, la muerte de Rick le afectó en una manera que nadie se imaginaba, ni siquiera la persona que más lo conocía, Mariann.
Todos los días Mariann era la primera en levantarse, y ese día no fue la excepción. Abrió sus ojos, y con la palma de su mano recorrió la cama en busca de la mano de Daryl, su sorpresa fue que no había nada. Se levantó muy rápido y vió que efectivamente Daryl no estaba en la cama, vió el armario y se había llevado algunas cosas con él, por lo que la chica comenzó a alarmarse, pero sabía exactamente donde estaba, en su lugar favorito, el bosque.
Así que la pelirroja fue en busca de su prometido y efectivamente, estaba en el lugar donde ella creía. Lo encontró sentado viendo al rio que los separaba, cuando la vió, no se molestó en moverse, simplemente se quedó ahí como si no estuviera:

-Hey.

-...

-Entonces, ¿volvimos al principio?

-¿Qué?

-Sí, el principio donde yo hablaba y tú me ignorabas, sólo mirándome con esos ojos.

-¿Qué ojos?

-Esos ojos con los que ves a cualquier desconocido... pero ¿sabes? Ahora duele porque ya no soy una desconocida ni tú lo eres para mí, eres la persona que más he amado en mi vida... y hace un año podías decir lo mismo... ¿alejarte? Eres mejor que esto Dixon.

-Solo quiero estar solo ¿por qué no puedes entender eso?

-No tienes por qué pasar por esto solo, estoy ahora contigo, estamos... Emily y yo.

-Quiero estar solo.

-No te dejaré solo porque sé que no quieres estarlo, tu mirada me lo dice.

Efectivamente era así, Daryl necesitaba a Mariann ahora más que nunca, pero con tantos sentimientos, lo único que pudo ocurrírsele era alejarse.
La chica le avienta una bolsa con comida y Daryl la atrapa:

-Espero comas, al menos haz eso por mí.

-Dile a Emily que pronto regresaré.

-Ya se lo dije-dice con cara desilusionada.

Mariann se da la vuelta pero Daryl la detiene con su voz que parecía haber salido por equivocación:

-Para siempre, Mariann.

Mariann se da la vuelta y lo mira fijamente:

-Para siempre, Daryl.

Daryl se pone a lo suyo y Mariann lo deja solo, como él pidió. Pero realmente, ella sabía que Daryl no quería estar solo, lo conocía mejor que cualquier persona en el mundo, así que cada semana iba con la excusa de llevarle comida, y así fue por un mes, hasta que Daryl exigió que le dejaran sólo:

-Necesito este tiempo solo, quiero simplemente enfocarme en Rick y en su búsqueda.

-No necesitas estar solo para eso Daryl, pero está bien, ¿quieres tu espacio? Te lo daré. Cuídate.

Mariann le avienta la bolsa con comida como era costumbre y se despide de él pues no iba a verlo en un buen tiempo, o al menos ese era su plan, pero se arruinó aquel día que vió el calendario y se dio cuenta que justo ese día era el día de su aniversario, por lo que Mariann preparó todo un buffet y llevó las cosas para hacer un picnic justo en el río donde estaba. Cuando llegó, vió a Dixon con la cara larga, algo malo había pasado pero sabía que le haría sentir mejor el distraerse con el picnic a hablar de lo sucedido:

-Hey-dice Mariann con una sonrisa de oreja a oreja.

-¿Acaso no te dije que necesitaba estar solo?

-Sí pero...

-¿POR QUÉ NO PUEDES ENTENDERLO? QUIERO ESTAR SOLO MARIANN.

La chica retrocede un poco dejando la canasta en el césped mojado:

-Daryl...

-EN LUGAR DE ESTAR AL PENDIENTE DE MÍ, ¿POR QUÉ NO MEJOR TE ENFOCAS EN SUNNYSIDE? SE ESTÁ YENDO A LA MIERDA PORQUE NO HACES NADA.

-No lo puedo creer...

Daryl se queda en silencio viéndola fijamente con esa misma mirada con la que la vió aquel día de su primera pelea porque Daryl no le quiso pasar la cubeta con pintura:

-Fui una estúpida al pensar que algún día podría cambiar tu podrido interior...-dice viendo al suelo.

Daryl se sorprende al escuchar esto y dirige su mirada al piso también:

-¿Y sabes qué? ESTOY HARTA DE TUS ATAQUES DE SOLEDAD, ¡HARTA! HARTA DE TU EGOCENTRISMO Y HARTA DE TUS MIEDOS AL ABANDONO.

-Y YO ESTOY HARTO DE QUE NO ME PUEDAS DAR NI UNA SEMANA SOLO CUANDO TE LO PEDÍ EXPLÍCITAMENTE, ¿NO CREES QUE AQUÍ LA EGOÍSTA ES OTRA? ¿HUH?- después de hacer esta última pregunta, Daryl patea la canasta, dejándola caer y esparciendo toda la comida y arriba de todo, un sobre donde se podía leer: "feliz aniversario, panquecito".

Daryl se sintió tan mal que las lágrimas comenzaron a brotar por sus ojos inevitablemente, y Mariann hacia lo mismo, pero ella por enojo:

-Y decías que jamás te convertirías en las personas que olvidan las fechas importantes ¿verdad?

-Mariann yo...

-SÓLO CÁLLATE, NO SABES CUÁNTO TE NECESITA EMILY, VENÍA A CELEBRAR NUESTRO ANIVERSARIO Y A DECIRTE LO TRISTE QUE NUESTRA HIJA ESTÁ...

Daryl se agacha para poder tomar el sobre con la carta pero Mariann lo arrebata de sus manos y comienza a despedazarlo tirando los trozos de papel al río:

-Mariann...

-¿Lo que dije en esa carta? Ya no importa porque ya no lo siento... a partir de hoy, yo ya no siento nada por ti Daryl Dixon... olvídate de mí...

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 01, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Para siempre...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora