El curioso síndrome de Gabriel/a Barris (Gender Bender)

Hormonas de pubertad

Pasaron los minutos y Gabriel aún estaba sentado sobre el inodoro del baño de los chicos, ya había hecho sus necesidades fisiológicas aún a pesar de la incomodidad por su repentina perdida.

Un llamado familiar se escuchó a fuera de los baños.

K: Gabriel, sal por favor, soy tu madre y vine para llevarte a casa, tu padre te está esperando.

Gabriel no entendía porque su padre lo estaba esperando pero se sintió aliviado de que su madre fuera por el a la escuela. Ambos subieron al auto y condujeron hasta llegar a casa.

Al entrar, su padre los estaba esperando con una taza de la bebida favorita de Gabriel, el chocolate caliente. Una vez todos sentados inició la plática.

G: ¿Podrían explicarme lo que está pasando?

T: Hijo, lo que estás pasando es un fenómeno muy común en nuestra familia y lo hemos experimentado casi todos en nuestro linaje, tu bisabuelo, tu abuelo y yo hemos pasado por eso.

G: Pero, no tiene sentido, que es por lo que estoy pasando.

T: Durante cierto tiempo y de forma completamente aleatoria tu te convertirás en una mujer.

G: ¡QUÉEEEEE!

Asies, durante generaciones la familia por parte paterna de Gabriel habían experimentado está clase de "síntomas", incluso las mujeres lo habían llegado a experimentar aunque en menor medida.

Cómo ya saben, consiste en qué por periodos momentáneos de tiempo su cuerpo se transforme al del sexo opuesto en este caso al de una mujer, la razón por la que su padre le dio chocolate caliente es porque una de las maneras más fáciles de controlar la transformación es mediante las emociones ya que está transformación está ligada al desarrollo hormonal de la pubertad.

De esa forma Gabriel regreso a la normalidad unos momentos después de beber el chocolate aunque está vez fue sin dolor.

T: Debes estar muy atento, ahora ya iniciaste la pubertad y te esperan ciertos cambios y no solo como chico, sino ahora también como chica.

G: ¿Pero hasta cuándo?, Yo nunca te vi convertirte en una chica.

T: La única forma de anular para siempre la transformación es que tengas s3x0 en la forma en la que te quieras quedar, después de eso no podrás volver a transformarte por el resto de tu vida.

G: ¡Bromeas! Aún estoy muy joven para eso.

T: Lo sé, yo no deje de transformarme hasta que tú mamá y yo nos casamos, pero tranquilo pues te explicaré todo lo necesario para tu transformación de haga más fácil de sobrellevar.

Las dudas de Gabriel poco a poco se fueron aclarando. Resulta que la transformación va adquiriendo ciertos cambios cada que pasa, por ejemplo el actualmente en su forma de chico es 2 cm más alto, además su rostro no luce tan infantil como hoy en la mañana lo que indica que con cada transformación su cuerpo irá madurando, aunque esto también afectará su forma de chica.

G: ¿Y mi hermana sabe de esto?

K: Tendremos que hablar con ella hoy en la noche, por lo pronto ve a darte un baño, te quedarás solo en casa hasta que llegue tu hermana ya que tú padre y yo debemos volver al trabajo.

G: Entiendo...

T: Hijo, una cosa más, la transformación se produce de manera distinta para todos, por ejemplo cuando yo me encontraba muy enojado o estresado mi cuerpo era el de un hombre mientras que cuando estaba triste o a veces emocionado me volvía una mujer. Necesito que identifiques que es lo que detona tu transformación para que la puedas controlar en un futuro.

G: ¡¿Podré controlarla y transformarme cuando quiera?!

T: Nunca podrás evitar tu transformación pero si sabrás cómo regresar a la normalidad más fácil.

G: Oh...ya veo

T: Ay me recuerdas tanto a mi la primera vez que yo me transformé, si es así cuando vayas al baño te gustará. Tu madre y yo ya nos vamos hijo, mucha suerte.

K: Uyy ya se a que te refieres...

La madre de Gabriel se puso roja como un tomate, después ambos salieron de la casa. Cómo Gabriel se fue temprano de la escuela tendría al menos 3 horas a solas para pensar y reflexionar sobre su pubertad, pero por lo pronto tenía curiosidad de saber que era eso que le gustaría al darse un baño.

Al entrar en el baño se quitó el uniforme completo y no notaba nada extraño sino hasta que bajo sus calzoncillos.

G: Ay - por - dios

Justo en la entrepierna de Gabriel, lo que antes era un triste y común miembro de un niño pequeño ahora era diferente, el vello púbico había crecido y también su miembro se miraba firme y más grueso que antes, aunque no estaba erecto era fácilmente más grande que antes.

G: Al fin, mi momento ha llegado.

La excitación debido a ver su miembro más grande era obvia, a cualquier chico le gustaría, así que tomó su mano y comenzó a hacerce lo que vulgarmente se le conoce como "Una Paja", poco a poco sentía como su amiguito despertaba y llenaba poco a poco su mano.

G: Definitivamente es mucho más grande que antes.

No solo era más grande sino más grueso y su erección era mucho más fuerte, aún no llegaba a la talla de un actor de cine para adultos pero esa idea ya no parecía imposible. Gabriel seguía y seguía frotando cada vez con más y más fuerza su miembro hasta que el punto máximo de excitación fue alcanzado, sin duda está había sido la mejor paja de su vida, justo antes de llegar al final sintió una pequeña descarga eléctrica, diminuta, más bien como un escalofrío recorriendo todo su cuerpo.

Su mano se apretó por completo cerrándose, no había nada que sostener.

Al mirar y darse cuenta el ya no tenía su miembro, al contrario el ahora se había convertido en una chica otra vez.

G: ¡Me tienes que estar jodiendo!

Su enojo era evidente, sin más por hacer solo se dio un baño, casi no sintió pena por tocar su cuerpo convertido en chica, no era tan diferente al de el puesto que solo no tenía un pene y su pecho solo se sentía gelatinoso y raro, ni si quiera era tan grande como para necesitar algún sujetador.

Después de darse un baño Gabriel se sintió sumamente cansado, ¿será que las transformaciones afecten su resistencia física?, Esa sería una buena pregunta para su padre. Por lo pronto solo se acostó en su habitación y de quedó profundamente dormido.