Capitulo 12

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Estoy sentada en el comedor jugando con el mantel, son las 10:00 y aun no llega, mi madre les dio de cenar a mis hermanos y los mando a acostar, tal vez sucedió un contratiempo y por eso no ha llegado, creo que lo mejor será llamarle, tomo mi celular y busco los contactos, joder, no tengo su número, ni nada, no sé ni donde vive.

Me tapo la cara con mis manos, ¿qué voy a hacer? tal vez no tarde en llegar, miro el reloj 10:30pm

-Creo que no va a venir-contesta mi madre mientras empieza a recoger los platos y deja uno con un poco de comida y se pone a comer.

-Me dijo que vendría-contesto secamente

-Pues al parecer no-dice con comida en la boca- mejor ya come algo, no vendrá tu "amigo"-contesta resaltando amigo entre comillas.

-¿Que quieres decir?

-¿Enserio alguien iba a venir?-pregunta dejando el plato de comida a un lado- mi vida, por favor mírate-me señala completa-nunca has sido alguien que sea mm... como decirlo-hace una pausa, me estoy preparando para lo que viene-social, bonita, si querías hacer esto para que te tomara atención solo debiste decírmelo.

Suelto una risa con amargura , mientras las lagrimas amenazan con salir, se me hace un nudo en la garganta que no me permite hablar.

-.Me hiciste perder tiempo en algo que no sucederá, aunque he de admitir que por un momento me la creí-sigue diciendo, mientras levanta lo que queda de la mesa

-¿Entonces te hice perder tu valioso tiempo?-pregunto sarcásticamente-lo único que quería era que entendieras que hago cosas normales, como conocer gente, quería saber que podía contar contigo, pero veo que me equivoque. !!Solo te importas tu, tú y tu!! y creí que podía hacer que eso cambiara, Adam es mi amigo y si no vino fue por algo tal vez grave-le contesto mientras lagrimas se me resbalan por mis mejillas ya calientes de la rabia-y te juro que no vuelvo a involucrarte en nada que tenga que ver conmigo- me paro de la mesa y me dirijo a mi habitación.

-Sabia que empezarías a llorar-hace que me pare en seco, se está burlando de mi, mi propia madre- deberías de dejar de pensar que las cosas pueden ser como en tus libros que tanto lees.

Me limite a seguir a mi habitación y cerré la puerta de un golpe, me tire en mi cama y cerré los ojos. "Tranquila, tranquila, no llores, no llores, superare esto, siempre lo hago ¿no?, ya pasara, solo calma" estuve así toda la noche hasta que caí en un profundo sueño a altas horas de la noche. Nada salió como yo lo planee ni siquiera un poco...

Me senté en mi lugar de siempre y espere a que llegara Adam, no sé si era bueno reclamarle o pedirle explicaciones o solo actuar como si nada, no he hablado con  mi mama desde anoche después de todo lo que aconteció, es algo estúpido que ni porque es mi madre me apoye o sea comprensiva conmigo y no es por quejarme y ser la típica adolescente que nadie entiende y su vida es una "mierda". Creo que nosotros mismos somos los causantes de que no nos tomen enserio.

-Aly! ¿como estas?-apareció Mei, y me abrazo- te traje esto -extendió su mano y me mostro una pulsera y lo que parecían ser conchas de mar

-¿Por qué no me dijiste que te ibas de vacaciones?-pregunte cruzando mis brazos y llevándolos a mi pecho

-Aly, no inventes claro que te avise, es un viaje del que mis padres querían hacer desde hace meses y te lo conté-protesto- hasta me dijiste que te trajera algo-dijo algo confusa

-¿Enserio? Yo no me acuerdo de eso-dije algo confundida- ¿como se me podría olvidar eso?

-Hay amiga creo que ya estas viejita y por eso se te olvidan las cosas-dijo riéndose

-Jajaja que graciosita-dije sarcásticamente

En eso entra la profesora y Mei se va a su lugar. ¿cómo es posible que se me olvidara algo así?, esto es muy extraño, me empezó a doler mas mi cabeza, saque unas pastillas de mi mochila, si, ahora si venia preparada, joder ahora tenía mareos, ¿pero qué jodidos me está pasando? le reste importancia, mire al asiento de Adam, no estaba, tal vez había sucedido algo grave en su casa y por eso no llego ayer y hoy no vino a la escuela.

Las clases se pasaron demasiado lento, y cuando por fin anunciaron el receso, salí del salón un poco mareada junto con Mei,  nos fuimos a sentar en unas bancas cerca del salón, estaba haciendo frio y eso me hacía temblar.

-¿Aly, que tienes? te ves un poco pálida-pregunta preocupada tocándome una de mis mejillas

-No sé, me siento un poco mareada, eso es todo

-Deberías ir a que te revisen, eso no es normal, tomando en cuenta tu falta de memoria, pero tal vez sea porque hay alguien-dijo coquetamente

-Mmh... tal vez,- creo que ya era hora de hablarle de el

-¿Enserio?-abrió los ojos como plato-¿Quién es? ¿Cómo se llama? Tienes que presentármelo, quiero saber quién es el afortunado

-Hoy no vino-conteste encogiéndome de hombros

-¿Es de la escuela? oh por dios que emoción!!

-Mañana te lo presento ¿te parece?

-Solo dime quien es, yo conozco a la mayoría

-No, mejor cuando venga ¿sí?  

Era mi mejor amiga ya era momento de presentarle a la persona que pues... me gusta, y hubiera sido mejor habérselo contado a ella y no a mi mama, pero ya no hay vuelta a tras, Solo espero que no sea tan difícil hacer que Adam hable con alguien más, porque con la única persona que ha socializado desde que llego es conmigo y no he visto que hable con alguien más.

¿Adam?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora