Capitulo 13

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Llegue a mi casa y encontré a mis hermanos y mi madre jugando lo que parecía ser un juego de mesa, subí a mi habitación aun no quería hablar con mi madre seguía muy molesta con ella, con Adam y conmigo.

Me puse a escuchar música mientras hacia la tarea, perdí la noción del tiempo y cuando voltee a ver el reloj ya eran las 12:00am, salí de mi habitación y me asome a la sala, ya estaba todo apagado y mi familia ya estaba dormida, me dirigí a la cocina por un vaso de agua y subí nuevamente a mi habitación y al cerrar la puerta, escuche que alguien estaba aventando lo que parecía ser piedritas a mi ventana.

Me asome y vi a una persona de negro parad, era quien aventaba las piedras, no percato mi presencia y aventó una que me golpeo justamente en la nariz.

-Auch!-exclame sobándome mi nariz

-Perdón, creí que aun no salías- contesto Adam, estaba aquí, afuera de mi casa.

-¿Que haces aquí?-pregunte hablando lo más bajito posible

-Quería disculparme por no haber llegado ayer-agacho la cabeza mientras hablaba, me tense al pensar en todo lo que había pasado esa noche,.

-No...te preocupes.., pero es hora de que te vayas.-terminando de decir eso me retire de la ventana.

-No, espera-oí decirlo desde afuera, pero cuando me asome ya no estaba, que rápido se rinde ¿no?, me acosté y cubrí mi cara con una de las sabanas, me sentía extraña, me pare y saque un cuaderno iba a terminar la tarea, pero cuando tome la lapicera y estaba a punto de escribir, mi mano no podía escribir, no sé cómo explicarlo pero creo que olvide el cómo escribir, me empecé a desesperar, eso no se olvida, empecé a tratar de escribir mi nombre pero... no lo logre, avente las cosas al suelo , esto me estaba preocupando, escuche que tocaban mi puerta , así que supuse que era mi madre, que quería saber por qué estaba haciendo tanto ruido, me levante y abrí la puerta.

-Lo siento mama, es que mis manos se sienten raras y-no era mi madre, enfrente de mí se encontraba aquel chico misterioso vestido de negro,  entre en shock, ahí parada enfrente de el sin saber qué hacer.

Se acerco a mí, pero yo retrocedí.

-¿Como entraste?-seguía acercándose hacia mí, y mientras retrocedía choque con la base de la cama.

-Creo que tu madre debería cerrar con llave, es muy probable de que si sigue así termine entrando un ladrón y se lleve todo lo que encuentre.

-¿Y qué es lo que quieres?-de ahora en adelante seré yo quien cierre esa puerta- mi madre puede entrar en cualquier momento y encontrarte aquí y regañarnos a ambos.

-Quiero disculparme

-Te disculpo pero ya vete.

-No, hasta que me perdones de verdad

-Pues no lo voy a hacer, mi madre me dijo que era obvio que no llegaría nadie porque nadie se fijaría en mi- estaba empezando a molestarme.

-Pero ese es problema de tu madre, porque si estoy interesando en ti... no, no te creas me estoy equivocando- hizo una pausa que a mí me estaba doliendo aun mas, baje la cabeza no quería verlo cuando lo dijera, se acerco a mí y tomo mi mano- no estoy interesado en ti, estoy enamorado de ti.

Estaba un poco aturdida por lo que acababa de mencionar, trate decir algo, pero no sabía que decir, hasta que lo mire nuevamente

-Yo también estoy enamo...-no pude terminar la frase cuando sus labios se unieron con los míos y me tomo de la cintura, sus labios eran cálidos, y me llenaban de vida cada vez que los tocaba, se acerco aun mas y profundizo el beso, miles de descargas eléctricas recorrieron todo mi cuerpo.

Se alejo y nos quedamos viendo el uno al otro , pero no en un silencio incomodo si no un silencio que me llenaba de paz y me hacía sentir bien.

-¿Por qué no llegaste?-pregunte nerviosamente

-Eso te lo contare después, mejor acuéstate ya es tarde y hay escuela.-me llevo a la cama  y se sentó al lado- me tengo que ir, te veo al rato ¿si?

-¿No te puedes quedar un rato, hasta que me duerma?

-Está bien- se acostó a un lado de mi y me rodeo con sus brazos y me acerco mas a él, podía sentir su respiración y eso me tranquilizaba, después de un rato quede envuelta en un sueño, en el que ya no me daba miedo lo que fuera a venir después.

 

¿Adam?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora