Lo sobrenatural siempre fue una realidad en su vida, puesto que siempre fue parte de ella. Escapando de sus demonios no espero encontrarlo a él, no esperó enamorarse y mucho menos espero que al tenerlo a su lado tuviera la valentía de hacerle frente...
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Pero no solo necesitaría a los clanes, sino que también necesitarían a vampiros nómadas, Rosalie y Emmett habían ido a buscar cerca de casa, a un viejo amigo, un patriota que Carlisle conoció en un campo de batalla en Yorktown, quien se convertiría en uno de los más grandes aliados que tendrían.
En las calles de una cuidad no muy alejada de Forks se podía escuchar el débil canto de un hombre medio borracho, quien en una de sus manos cargaba una guitarra, guardada en su funda.
O eso hasta que a una gran velocidad fue tracleado, llavandolo a un callejón algo oculto por la oscuridad de la noche.
-"Cierra la boca"- dijo el hombre que había tracleado al otro un hombre de apariencia de treinta quizá menos, quizá más, tenido unos ojos rojos carmesí que llamaban mucho la atención, lo había dicho con tanto fastidio al escuchar como el hombre borracho trataba de soltarse de su agarre, buscando la mayor cantidad de aire posible, cosa que no era muy fácil ya que el vampiro lo estaba agarrando con fuerza y firmesa del cuello.-"Odié la primera invasión británica. Y odio la segunda aún más"-.
-"¿Incluso los Beatles?"- pregunto alguien a algunos metros. Al instante ambos hombres voltearon a ver en dirrección a dónde provenia la voz, viendo a un hombre de apariencia de veintitantos años, castaño muy músculoso y alto, junto a este estaba una mujer rubia de apariencia de no más de veinte, muy hermosa. Emmett Cullen y Rosalie Hale.-"¿Enserio, Garret?"- pregunto al vampiro de ojos rojos.
-"Son hábitos antiguos"- dijo en respuesta Garret sin soltar al humano que se convertiría en su cena.
-"Carlisle te necesito, hemos encontrado a la elegida"- dijo Emmett, haciendo que por la impresión Garret soltara al hombre, que al instante trato de escapar.
-"¿Estás seguro que es ella?"- pregunto Garret una vez más, desde niño había escuchado las leyendas de la elegida, pero siempre pensó que era un simple mito, o eso hasta que se convirtió en un vampiro y escucho que no solo era un mito, sino que era una verdad y que un día llegaría para salvar el mundo y dejarlo como nuevo.
-"Si"- dijo Rosalie con una sonrisa.
-"Suena interesante"-.
-"¡Auxilió!"- gritaba el humano mientras trataba de escapar.
-"Pero primero terminaré de comer"- dijo Garret antes de correr al humano volviendo a tirarlo al suelo y rápidamente drenar toda la sangre de esté.
Apenas acabo de comer los tres regresaron a Forks, Garret no solo esperando con ansias el conocer a la elegida al día siguiente sinó que también luego de tantos años pudo encontrar a su compañero, su alma gemela, siendo una de las hermanas Denali, más específico Kate Denali.
༒︎
Al día siguiente
La noche paso rápido y con eso la llegada del día llegó, en la cabaña del bosque donde Skaylar vivía con Jacob y los tres dragones se escuchaban las risas mientras que desayunaban.
Cualquiera que viera la casa y escuchará las risas se podía dar cuenta que en ese lugar vivía una verdadera familia.
Edward Cullen quien estaba a unos metros de la cabaña, para informarles que más vampiros habían llegado y que querían conocerla veía la cabeña con envidia.
Envidia de los pensamientos que Jacob y Skaylar tenían sobre el otro, incluso sin el don de Jasper podía sentir el gran amor que los unia y este no solo era por el lazo de imprimación que Jacob tenía en Skaylar, sino que era un verdadero lazo, uno tan puro y hermoso, que lo envidiaba.
El nunca había tenido un lazo así de fuerte con Bella y siempre creyó que cuando la convertiría ese lazo se volvería tan fuerte como el que esos dos tenía, pero estaba muy equivocado, lo único que había logrado era que el lazo se debilitará más y más.
Cada vez que sentía como el lazo que tenía con Bella se debilitaba más, se preguntaba si en realidad eran almas gemelas, si en realidad era su compañero o si solo se dejó llevar por el aroma de la sangre de está, ese aroma que para el era como una droga.
Y que posiblemente solo era su tua cantante y no su compañera.
Que en realidad lo que había dicho Skaylar era verdad y Bella solo mostraba una máscara, una máscara con la que quería engañarlo para conseguir la inmortalidad.
Sin duda quería saberlo y por eso mismo envidiaba la felicidad y amor que emanaban esos dos por cada uno de los poros de sus pieles
Tratando de ignorar las risas divertidas y las calidad palabras que estos se daban para acercarse a la puerta de la cabaña y tocar la puerta.
-"Yo voy, no te preocupes"- escucho decir a Jacob, antes de escuchar como este se iba acercando y abría la puerta viendolo con sorpresa.-"Edward, ¿Que sucede?"-.
-"Yo vine a avisarles que llegaron las vampiros y querían conocer y hablar con Skaylar"- respondió con su usual tono deprimido y trizte.
-"¿Esta todo bien contigo, Edward? No te ves muy bien"- pregunto Skaylar mientras se acercaba a la puerta, viendo el aura deprimida del vampiro castaño.-"¿Quieres pasar?"- pregunto.
-"Yo, se los agradecería mucho, pero no quiero molestar"- dijo el vampiro casi en un susurró pero aún así lo escucharon claramente.
-"Tranquilo Edward no nos molestas en absoluto, estábamos terminando desayunar, solo son estos tres latosos quienes no han acabado de comer"- dijo Jacob escuchando en respuesta los gruñidos de los tres dragones quienes estaban en la cocina.-"Adelante pasa"-
Edward no dijo nada simplemente entro en la cabaña, asombrandose al verla, podía ser que no era una casa llena de lujo como la casa Cullen pero era muy acogedora, puede que no era la cosa más perfecta ni nada por el estilo, pero para la joven pareja era perfecta, era todo lo que podían pedir.
-"Siéntate, no pasa nada"- dijo Jacob muy calmado, cosa que no paso desapercibido por el vampiro, siempre que veía al lobo está estaba tenso, pero quizá era por Bella, y ahora que ella no estaba podía ver cómo este estaba calmado y relajado.
-"¿Quieres decirnos que pasó?¿Te ves un poco más deprimido que de costumbre?"- pregunto Skaylar mientras se sentaba en uno de los sillones, Jacob sentado junto a esta
Y fue cuando finalmente Edward exploto, soltó todo lo que tenía dentro desde varios meses atrás, desde que conoció a Bella, luego de tanto tiempo finalmente admitió que Bella no era su compañero, que solo era su tua cantante.
Contó todo...
Continúara....
Voten espero que les haya gustado
M
uy pronto nuestro querido y odiado vampiro depresivo va a conocer a su verdadera compañera.
