LOKI. God of Mischief | Fanfic Terminada

Capítulo 1. Asgard.

¡Hola! Antes de empezar quiero avisarte de que esta historia fue la primera que escribí. La trama, el desarrollo de personajes y escenas está un poco flojo y no creo que represente para nada la forma en que escribo ahora :( 

De todas formas le tengo mucho cariño y es una historia que se lee rápido así que si has entrado aquí espero que no seas demasiado durx conmigo 🤠

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— Loki Laufeyson, hijo del padre de Todos, príncipe de Asgard y hermano del Dios del Trueno. Compareces hoy frente al Consejo Superior del reino de Asgard por tus crímenes realizados contra la corona y la integridad de los nueve reinos.

La sala se sumió en un silencio profundo. El acusado se irguió y fijó su mirada en aquel que aún decía ser su padre (a pesar de conocer ya cuál era su verdadero origen).

— Se te acusa de robar una de las gemas del infinito, la gema de la mente, una de las piedras más valiosas de la galaxia. La joya llevaba años custodiada aquí, y la pasada noche desapareció misteriosamente de la cámara de las reliquias dejando muertos a los guardias responsables de su protección. Lo único que encontramos en aquella sala fue un rastro de magia verde brillante. Todo apunta a que tú, Loki Laufeyson, entraste y robaste la gema para alimentar tu ego y buscar tu glorioso propósito. ¿Algo que añadir?

Loki fue liberado del agarre de unas esposas y de una mordaza que le impedía hablar. Por primera vez fue él quien tuvo la palabra. Se levantó sin prisa y pasó sus manos por el traje y capa que llevaba para alisar las posibles arrugas. Colocó su pelo tras las orejas y miró al consejo que hoy le juzgaba.

— Queridos amigos... - Dijo mientras hacía una pequeña reverencia cómica. ­— Sé que no soy el mejor aliado de Asgard, y también sé que no soy la persona en la que deberíais depositar vuestra confianza - Completó mientras se encogía de hombros y miraba a lo largo del amplio semicírculo de personas que se encontraba frente a él. — Pero si algo sé sobre mí, es que no voy dejando rastros de magia. Y también sé que si fuese yo el culpable de esos actos los reconocería sin problema, porque no hay cosa que me guste más en el universo que tener poder queridos amigos. Lo que trato de decir es que todos los de esta sala conocemos la inteligencia que poseo... Todos sabéis que si hubiera querido robar esa gema lo hubiera hecho y no os hubierais enterado hasta pasados varios años.

Su boca se curvó en una sonrisa de lado, pícara e incluso maliciosa. Se giró para ver como el pueblo asgardiano lo miraba desde el fondo de la sala. Algunos apartaron su mirada de los ojos del Dios de los Engaños, y otros más valientes quedaron viendo como el príncipe recorría la sala a paso lento.

— Padre, madre, vosotros sabéis tanto como yo que firmé un justo tratado de paz para poder quedarme aquí tras lo que sucedió en Nueva York. Nunca prometí ser el príncipe perfecto, pero acepté no atacar a nuestro reino a cambio de una vida en libertad.

Loki sabía que su madre, la reina Frigga, confiaba en él. Lo veía en sus ojos. Además la conexión que ambos tenían le permitía conocer hasta lo más profundo del alma de la mujer que lo crió. Odín sin embargo parecía más escéptico. Sabía que no sería fácil convencer a toda la gente que estaba allí presente. Primero porque el consejo lo odiaba por haber puesto en peligro Asgard varias veces; y segundo porque también sabía que harían lo posible para deshacerse de él tras saber que Thor había dicho en varias ocasiones que no quería el trono.

— El consejo deliberará sobre tu destino, Loki. A menos que quieras añadir algo más. – Las miradas se fijaron expectantes en el príncipe que estaba sentado de nuevo en el centro de la sala.