[愛] afrodita➸ renmin

✯god meets sin✯

"Cual dos enamorado primerizos, Ares y Afrodita se hallaban desnudos en el lecho de la diosa de la belleza; estaban tan ensimismados con sus juegos amorosos que no repararon en la trampa que les había tendido Hefesto hasta que, de improvisto, una pesada red metaliza callo sobre ellos y los atrapo entre sus mallas, tan solidas y robustas que ni siquiera el poderoso dios de la guerra pudo quebrarlas." —Ovidio, Metamorfosis.

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habían pasado algunos meses desde el anuncio de boda dado por los dioses jeno y haechan.

todo el olimpo se había dedicado a organizar la boda de la pareja de dioses más rara de la familia de taeyong. las musas y esclavas corrían de un lado a otro con los arreglos.

¡en unas horas sería la gran boda!

jisung organizaba todo, daba órdenes a los esclavos, organizaba a las ninfas y a las musas y acomodaba el lugar donde irían los pegasos.

—no, no, chenle.— jisung hizo una mueca y negó repetidas veces.— el florero no me gusta ahí, ¿qué tal más a la izquierda?

su novio soltó un resoplido y contó hasta diez antes de sonreírle forzadamente.

—pollito, sabes que te amo, pero jódete. has dicho lo mismo desde hace media hora y aún no encuentras el maldito lugar donde poner las orquídeas.

jisung le sonrió en disculpa y se acercó para dejar un beso en la frente de su novio.

—perdón por estar así, es la boda de mi hermano haechan, precioso. dame eso, yo lo acomodaré.— el peli naranja le dio el adorno a su novio y le sonrió en grande.— ahora ve y organiza a las musas de renjun hyung para que acomoden lo que falta.

chenle asintió y corrió para hablarle a las musas.

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—¿estás seguro que éste traje me queda bien, jaemin?

los dioses del amor y la guerra se encontraban en la habitación de renjun. faltaban dos horas para la celebración nupcial y sólo faltaba renjun por arreglarse.

los cantos de las musas sonaban a lo lejos mientras intentaban amenizar la espera para los dioses invitados. jaemin le sonrió al rubio y se acercó para besarle.

—incluso sin ropa te verías hermoso, jun.

el nombrado tomó un fuerte color rosado en sus mejillas y corrió a refugiarse en los brazos de su novio.

—¿qué cosas dices? eres un descarado.

—ah, lo dice el que hablaba de complacerme todo el día y entretenerme.

renjun rió aún con su cuello escondido en el del peli negro y después de unos minutos levantó su cara para ver a la divinidad que tenía frente a él y que agarraba con fuerza su cintura.

observó sus labios cerrados, su color rosa claro. observó su fina nariz. observó sus ojos, esos ojos gatunos que aparecían en sus sueños todas las noches. observó sus cejas tupidas y la forma en cómo encajaban a la perfección con su cara.

y cuando terminó de observarlo, se dio cuenta que después de todos los meses de convivencia con él, quizá ya estaba muy enamorado, y también se dio cuenta que jaemin era perfecto para sus ojos, y que no quería dejarlo nunca.

renjun fue acercando su cara hacia la de jaemin, tomó una de sus manos entre la suya y se puso de puntas para dejar un pequeño beso en su boca.