[愛] afrodita➸ renmin

✯god meets world✯

"¡Ay de mí! ¿De qué clase de hombres es la tierra a la que he llegado? ¿Son soberbios, salvajes y carentes de justicia o amigos de los forasteros y con sentimientos de piedad hacia los dioses? Y es el caso que me rodea un griterío femenino como de doncellas, de ninfas que poseen las elevadas cimas de los montes, las fuentes de los ríos y los prados cubiertos de hierba. ¿O es que estoy cerca de hombres dotados de voz articulada? Pero, ea, yo mismo voy a comprobarlo a intentaré verlo." —La Odisea, Homero.

jaemin, soltó un suspiro, habían pasado unos meses desde que él había llegado nuevamente al olimpo, la vista desde el olimpo era mejor que la vista que tenía frente a él. renjun se encontraba a su lado hablando con una de sus musas y él trataba de pasar entre la gente sin querer tocarla.

después de unos momentos, la musa se alejó de ellos y renjun se acercó a jaemin para hablar con él.

—no me siento cómodo con ésta túnica, mis pezones son muy sensibles y ésta cosa los cubre, ¡se irritarán!

jaemin soltó una risa que salió más como un suspiro y pasó su mano por la espalda de huang para recargarla ahí.

—si mostraras tus pezones ahora mismo estoy seguro que todos los griegos se quedarían ciegos, tanta belleza les quemaría los ojos.

—¿hablas de que mis pezones son bellos?

—¿acaso miento?

renjun soltó una risa y sacó la mano de jaemin de su espalda para tomar su brazo y enredarlo con el suyo. volteó a ver a la divinidad azabache esperando por su aprobación y cuando la tuvo, sonrió con orgullo para seguir su camino.

ambos dioses debían llegar a la escuela de atenas, taeyong les encomendó que fueran a hacerse cargo de iluminar la asamblea de los filósofos.

ese día le tocaba a haechan hacerlo, pero al parecer estaba adolorido debido a una caída que tuvo mientras entrenaba a sus pegazos y no podía levantarse.

—¿crees que haechan esté muy herido?— Preguntó renjun con preocupación.

—oh si, él debe estar demasiado herido.

—pero, ¿de donde se cayó?

—lleva meses cayéndose de la punta del pene de jeno hasta sus bolas, y lo hizo repetidas veces, debe estar tan adolorido el pobre de mi hermano.

a renjun le fue imposible no soltar una carcajada ante el sarcasmo del azabache y a jaemin le fue imposible no seguirla.

después de un rato de caminar, jaemin y renjun llegaron a la escuela, pasaron normal entre los filósofos que no podían observarlos y se postraron en unas nubes igualmente invisibles ante los ojos humanos.

cuando la asamblea comenzó, los dioses comenzaron a repartir sus dones, era sumamente importante este tipo de asambleas, pues los humanos podían descubrir nuevas cosas para ellos o en el peor de los casos, arruinar sus avances.

«¿por qué existe el por qué?»

«¿cómo nación el padre de zeus(taeyong)?

«¿por qué se llama zeus? ¿Y por qué los demás dioses se llaman así?»

jaemin rodó sus ojos y comenzó a ver a diferentes puntos tratando de no escuchar las babosadas que soltaban los filósofos.

—¿aburrido, jaem?— habló renjun mientras veía las disputas de los sabios.

—más bien, enfadado. ahora mismo pudieran estar resolviendo cosas del cosmos, pero no, están pensado en porqué nos dicen así y cómo nació cronos.