El inicio de la vida en prisión

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-Ivan Castrovilli, edad: 22, sentenciado a una vida en prisión por rebelarse contra el imperio? Mira tu, alguien interesante por aquí, eh?-Dijo la asistente que se me asignó en ventanilla después de pasar por la puerta norte.

-Tan impresionante soy? Muy considerada de su parte, ahora es el momento donde me ayudas a escapar, correcto?-Dije sarcásticamente sin ninguna intención de conseguir nada.

-Muy gracioso pero esos trucos no funcionan aquí. Aunque no lo parezca, cada uno de nosotros somos bien pagados por el empleo que realizamos así que... sobornadnos no es una opción de escape. Ups, creo que hable de mas jiji-Dijo la asistente en ventanilla "Sacó un uniforme blanco y me lo dio para que me lo pusiera ahora mismo para poder continuar"

-Gracias... espera que me lo ponga en frente de usted o como?-Dije desconcertado.

-Oh claro, es por eso que todas las asistentes somo mujeres, no creo que haya ningún problema en que una linda chica como yo te vea desnudo, o si?-Dijo la asistente burlándose.

A la mala me desnudo y tiro mi vieja ropa y me pongo el traje blanco que me dio la chica mientras veo cómo se ríe de mis preocupaciones pero sin importarme mucho... Al terminar, me doy cuenta de que el traje es realmente incomodo y la chica me comienza a hablar de nuevo.

-Lo que imaginé, te queda horrible jiji-Dijo la asistente-

-Muy bien, dime las reglas de este basurero y sacame de aqui-Dije desesperado de sus risas burlonas.

-Está bien señor rudo, te las diré ahora mismo...-Dijo la asistente-

Está prohibido intentar escapar del edificio, cualquier intento de salir será reprendido rápidamente con la pulsera que se te dio anteriormente. 3 strikes y serás enviado a la sala de los malagradecidos.  Disfruta de tu nueva oportunidad de vivir la vida en la prisión más segura del mundo. Algunas de las viejas reglas capitalistas están presentes en las instalaciones sin embargo ser prisionero te revoca de cualquier derecho humano existente. Los guardias y el personal que trabaja aquí tiene el derecho de hacer lo que quieran contigo si llamas la atención de la mínima manera posible. Ciertas actividades te darán créditos los cuales podrás canjear por ropa o comida de mejor categoría. 

-Esas son todas las reglas y... justo a tiempo, es hora de que pases, tal vez nos volvamos a ver adentro jeje-Dijo la asistente.

La puerta se volvió a abrir y entró un guardia a sacarme de la sala.

-Un momento, no entendí nada de estas reglas, Maldición! Dime por lo menos tu nombre si decis que nos volveremos a ver!-Dije desesperado mientras el guardia ya me tenía en la entrada.

-Mi nombre es Iris cariño... y yo se tu pequeño secretito"guiña un ojo"-Dijo Iris antes de que me sacaran del pequeño cuarto.

Dijo mi pequeño secreto... tengos muchos secretos pero existe uno al cual específicamente llamó "pequeño" Como demonios ella sabría eso? Aunque tuviera mi información no es posible que sepa eso...

Después de caminar un minuto por un pasillo oscuro mientras pensaba en las palabras de Iris, me quedé perplejo ante la ciudadela que había frente a mis ojos... era sorprendente lo que estaba edificado en este edificio... una ciudad para todos los maleantes? Debe haber un truco detrás de todo esto, si no mal recuerdo Iris me dijo que carecía de derechos humanos entonces... seguramente sea un tipo de utopía falsa.

-Muy bien, IL0-33. Aquí está tu grupo, la encargada del grupo les explicara más en detalle lo que harás de ahora en adelante el resto de tu vida-Dijo el guardia que me había escoltado hasta la ciudadela.

-Que dices? Encargada de grupo? Acaso somos niños de primaria o algo asi... no jodas!-Dije de mal humor.

-Nada de bromas, ve con tu grupo ahora escoria-Dijo el guardia "apuntando con un arma pequeña contra Iván que le da una descarga semi potente"

Me dio una descarga potente pero para nada letal que me hizo arrepentirme de haber sido sarcástico de nuevo... ahora entiendo el hecho de no tener derechos significa un gran problema para los prisioneros...

Al caminar hacia mi grupo, me doy cuenta que está conformado por 9 personas más aparte de mi, entre ellas, estaba Emily, una de mis camaradas de batalla, casi no la reconocía. Me acerque con ella para hablar pero me volteo a ver y se me adelanto.

-Ivan, que gusto verte de nuevo... Pensé que te habían asesinado-Dijo Emily con una sonrisa en el rostro mientras me saludaba con la mano.

-Emily... y el código de identificación?-Dije suspirando.

-Ivan... eres un amargado, que mas da ahora. Demonios! Uno que se preocupa por ti y me dices que el código...-Dijo Emily enojada haciendo puchero.

-Lo siento Emily, codigos son codigos, sabes? Pero igual me alegro de ver que estes bien-Dije con una sonrisa para contentarla.

Nuestra Reunión se vio interrumpida por la que parecía ser la encargada de grupo...

-Buenos Días grupo IL0, de ahora en adelante yo seré su encargada, Mi nombre es Tanya, aprenderlo bien pues yo seré quien haga de su vida en prisión sea lo más beneficiosa para el imperio, así que de momento no me tomaré la molestia de aprender sus nombres-Dijo la encargada de grupo, Tanya, con un rostro serio.

Después de algunas preguntas sin importancia de los otros miembros del grupo, Tanya continuó hablando.

-Bien, no más preguntas. Quiero que me sigan hacia este lado de estas bancas para continuar con una prueba rápida y sencilla. Siéntense, no tardaremos mucho-Dijo Tanya.

Me resigne de momento a caminar y sentarme a donde nos indico junto con los demás. Estaba observando a mis alrededores para apreciar lo grande que era este lugar e intentar empezar a inventar un plan de escape. Cuando finalmente me senté donde dijo Tanya, me quede impacto por lo que vi frente mis ojos...




¿Buscando Libertad? - TGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora