De regreso a mi juventud

Capítulo 4

Zoe está muy emocionada por su vestido de novia que su madre le va a hacer, pero siente que no estará listo para el cumpleaños de su príncipe, pero también se siente un poco presionada por lo que paso el domingo y tampoco ah tenido el tiempo para poder platicar sobre eso con sus padres, y con sus amigas, solo hablan de ellas y sabrá que no la entenderán, así que prefiere no decirle a nadie, solamente a su diario. A su corta edad sabe el como esconder sus sentimientos y el como reprimirlos, puede que esto le ayude a su futuro, así es como lo ah tomado, pero sabe que no es bueno el guardarlo todo.

Paso el lunes de maravilla, con la primera visita de su príncipe y con la noticia de su cumpleaños cercano, eso animo a la familia un poco, luego llego el martes, Elizabeth, la madre de Zoe, tenía una pasarela dentro de poco, así que le comento a su esposo y a su hija que no estará mucho tiempo en casa, ya que tenía que entrenar a las modelos y tiene que hacer los bocetos y eso le llevaría mucho tiempo, así que no se preocuparan en que no la vieran en casa, que no se demoraría dentro de dos semanas regresaría a casa y pasara tiempo con ellos.

Después de eso en un parpadeo llego el viernes y Asher, su padre comento que no estaría en casa toda la semana que viene, ya que le tocaba hacer un viaje de negocios al otro lado del mundo, pero que les traería recuerdos y muchos dulces, pero ya le había pedido al mayordomo que no dejara entrar a nadie mas y que el iría por Zoe, y que su amigo Mauritzio la vendría a ver y jugaría con ella, ya que se sentiría muy sola.

Zoe solo asintió, se emocionó al escuchar que su príncipe vendría a jugar con ella, pero tenía aun ese sentimiento del que aún no sabe qué es eso realmente, es como una punzada, pero prefiere no comentarles a sus padres, así que solo sonríe.

Entonces hija que te parece la idea de que el tío Mauritzio venga a jugar. -Pregunta Asher.

¿Está bien papá, pero seguro que no estará ocupado?

Claro que no hija, él se ofreció porque pensó que estarías sola si nosotros nos vamos.

En eso suena el teléfono de la casa, quien será el que llame a esta hora, ya casi eran las 9 de la noche, así que podía ser el trabajo, ¿o no?

Señor, le habla su hermano. -Comento una de las criadas.

Oh, enserio, pásamelo, ¿quiero saber cómo está su hijo?

Le pasaron el teléfono a Asher y Elizabeth llevo a la pequeña Zoe en brazos a que se fuera preparando para irse a dormir, pero como su aun le faltaba una hora para que fuera a dormir, pero prefirió no preguntar, porque su madre le respondería que son cosas de adultos.

Se lavo la cara y los dientes también, se cambió de ropa a su pijama, se acostó y vio que apenas eran las 9:15, se despidió de su mamá, se cerro la puerta y decidió escribir en su diario, el cómo se sentía, porque ella sabía que era la única "persona" que la escucharía y le pondría atención.

16 de Marzo del 2001

Parece que mamá y papá hablaron después de que mami se iría por toda esta y la otra semana a su taller, creo que decidieron pedirle a mi príncipe que me cuidara esos días para que no vuelva a pasar otra vez con mis tíos, aun no sé cómo sigue, o que ha pasado, me lo han ocultado, pero tampoco quiero preguntarles porque no quiero molestarles, así que solo me siento a escuchar las cosas y no opino nada a menos que me pregunten.

Y no hay nada de nuevo esta semana simplemente esta noticia, aunque me sentiré sola y triste me alegra por que se que al menos no estaré sola cuando llegue a casa y podre jugar con alguien y no sola como la mayoría de los días.

Me siento un poco cansada creo que ya es hora de dormirme, aunque ya sea temprano, pero no quiero quedarme despierta muy tarde, así que descansa amigo mío y hasta mañana.

Atte.: Zoe

Zoe volvía a poner el diario de vuelta a su escondite, se acomodó en la cama y en menos de cinco minutos se quedó dormida.

Mientras tanto en la habitación de los padres de Zoe, arreglando sus cosas para el trabajo y la ropa para el día siguiente.

Querida, tenemos que cuidar más a Zoe y protegerla. –Comento Asher.

Lo sé querido, sabemos que ella es una niña muy diferente a los demás, en el colegio, las maestras se sorprenden por su vocabulario y su inteligencia, y desde muy pequeña ha sido muy independiente y que es una niña prodigio, pero si tu hermano y su esposa se enteran, no me imagino lo que le podrían hacer. –Comenta Elizabeth con temor.- ¿Pero si seguro que estará bien con Mauritzio?

Claro que si estará bien, él me ha dicho que quiere tener una hija como Zoe, así que si llega a pasarnos algo, sé que él se hará cargo de ella, pero esto es en algún futuro, así que tranquila e intentemos estar más con ella. –La intenta tranquilizar Asher-

Lo sé querido, pero será una semana, sin ver a nuestra hija, y luego con lo que paso con el hijo de tu hermano, aun me da inseguridad, tengo miedo de que vengan y que lastimen a nuestra niña.

¿Qué tal si la metemos en una escuela de autodefensa después de las clases, para que sepa que hacer en esos casos, no suena tan mala idea, verdad cariño?

Asher, nuestra hija tiene solo cuatro años y tú quieres que entre a esas cosas, pero pensándolo bien, no suena tan mala idea, ya que así podrá defenderse de la gente que le quiera dañar, pero también tenemos que meterla a clases de dibujo y pintura, sus maestras me comentaron que dibuja mejor que sus compañeros, así que quiero que mejore en su destreza para que sea buena dibujante.

Tienes razón, aun no tiene clases secundarias, así que estar bien en lo que se hace mayor, que lleve dos clases extras por cada ciclo escolar, y que mejore en sus habilidades, no suena tan mala idea.

Bueno, entonces mañana busco una buena escuela para sus clases de dibujo y pintura, y que las maestras sean pacientes y que sean buenas.

Y yo busco alguna escuela para la autodefensa y veremos en una semana que tal como le va a nuestra hija.

¿Asher, no te has olvidado del cumpleaños de Mauritzio, es dentro de dos semanas, tienes alguna idea o ya sabes que hacerle de sorpresa?

Oh es cierto, aun no eh pensado en algo específico, pero quiero que disfrute este cumpleaños, ya que no ha tenido tiempo o dinero para celebrárselo.

¿Y por qué no puede ser en un alguno de nuestras casas de la playa, hacerle algo pequeño y ya en la tarde ir a caminar en la playa y disfrutar la puesta del sol, como en nuestra luna de miel?

Oh, que recuerdos aquellos, éramos tan jóvenes y sin tantas preocupaciones y sin tanto trabajo, y luego de ese viaje tuvimos muchos más, y luego de nuestro viaje a playa, me diste la mejor noticia, que tendríamos a nuestra hija Zoe, recuerdo ese día, y lo atesoro como no te imaginas.

Jaja tienes razón, pero tu cara fue lo mejor, tu reacción fue que no sabía qué hacer, luego me miraste y lo asimilaste, y me abrazaste demasiado y no me soltabas, y el día que supimos que sería niña y cuando nació, esas son mis mejores recuerdos y claro también cuando nos casamos.

Sabes Elizabeth, cuando me siento cansado en el trabajo, solo me pongo a pensar en ustedes dos y me pongo mejor e intento acabar lo más rápido solo para verlas y abrazarlas.

Oh, sabes que te amo demasiado y me encanta hablar contigo, pero ya es demasiado tarde y tenemos que descansar para un nuevo día mañana.

Yo también te amo Elizabeth, y si ya tenemos que descansar ya siento el cansancio.

Y risas.

Después de despedirse Asher y Elizabeth se prepararon para dormir, terminarlos sus cosas, se acostaron y se fueron a dormir