Akuma No Kyojin [Tú en SNK]

T3 Capítulo 5 Una Pequeña Llama

Mitras
Ciudad capital dentro del Muro Sina

El fuego de las antorchas danzaba de manera regular, creando distintas sombras en el oscuro pasillo de ladrillos. El Comandante Erwin se encontraba dentro de una de las celdas de aquel lugar, encadenado de las muñecas a la pared, y sentado en su cama. Pensativo...

Pero pronto, la puerta fue abierta y un militar entró a la celda. 

???: Ya estoy aquí, Erwin

La celda fue cerrada por el guardia de fuera, y el comandante observó al hombre enfrente de sí.

???: Es repentino, pero procederemos a interrogarte

El comandante sólo lo observó. Sabiendo lo que se avecinaba...

En Trost

Roy: Entonces ¿No hay duda de que la Legión asesinó a un civil?

Un hombre viejo, acompañado de otro de unos veintitantos años, se encontraban enfrente del comandante de la Policía Militar, Nile Dok. El cual ya llevaba un rato respondiendo sus preguntas mientras estos anotaban todo en un par de libretas.

Nile: Eso dicen las pruebas. Pero aún no tenemos todos los detalles

???: ¿Es la Policía Interior la que dirige la investigación? *preguntó el más joven*

Roy: ¡Oye, Peaure! 

El hombre más viejo le quitó la libreta a Peaure, y después se giró hacia Nile.

Roy: Discúlpelo, comandante Dok. Es nuevo y aún no conoce bien las normas. No escribiremos nada de la Policía Interior, ni del nuevo equipo de maniobras

Nile: Muchas gracias Roy...

El comandante se giró para ver el cielo, y comenzó a pensar.

El nuevo equipo de maniobras. Los disparos no le harán mucho a un titán, pero pueden matar humanos. Sin duda era un arma perfecta para cazar a los de la Legión. Y si nadie les habló de su existencia a él ni a nadie más, es porque ellos podrían ser sus próximos objetivos...

Nile: Esperen a que llegue el informe *dijo para después retirarse del lugar*

En otro lado, dentro de Trost

El hijo del recientemente asesinado Dimo Reeves, se encontraba corriendo desesperado por unas calles vacías del distrito. Mientras tres personas lo seguían de cerca.

???: ¡Espera ahí desgraciado!

Sus perseguidores, eran tres soldados de la Policía Militar Interior. Armados con rifles, que ya llevaban algunos minutos persiguiendo al chico.

En un intento de perderlos, el chico giró a un callejón que se encontraba a la izquierda. Pero, para su mala suerte , el callejón terminaba por un muro de piedra de unos cinco o seis metros de alto.

???: ¡Idiota, por ahí no hay salida! *se burló uno de los soldados*

Flegel: Maldición...

El chico comenzó a subir unas cajas que se encontraban enfrente del muro de cemento que impedían su salida. Estaba cansado, él no era bueno en actividades físicas debido a su peso, pero no tenía opción.

Fue ahí, que Hange con ayuda de su equipo de maniobras bajó al callejón, y de manera rápida terminó agarrando al chico, y lo subió al tejado de un edificio. Mientras le tapaba la boca para que no gritase.

Los perseguidores al revisar el callejón, y al no ver señales del hijo de Dimo, continuaron con su persecución, y se dispersaron en varios lados de ese lado especialmente dañado de la ciudad.