T3 Capítulo 11 Una Nueva Era

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El sol estaba ocultándose, y el viento movía el pasto carbonizado. Mientras que debajo del suelo ahora abierto, se podía observar una profunda cueva de cristal, llena de piedras y tierra, con un hombre que salía de esta a paso lento.

Kenny se encontraba con múltiples heridas en su cuerpo, aunque las más notorias eran las de su rostro.

Del lado izquierdo estaba manchado de sangre por algunas heridas repartidas en su frente y la barbilla. Pero del lado derecho, ya no tenía cabello y su piel tenía un tono morado debido a las quemaduras que había recibido.

Después de caminar con su pierna cojeando, llegó a un árbol donde se apoyó y se quitó la pechera de su uniforme, para después dejarse caer con su espalda chocando contra el tronco. 

Estaba debilitado y agotado de gran manera. Por lo que con cansancio, cerró su único ojo y se perdió en la profunda oscuridad de su mente.
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Kenny: ¡Agh! !Aléjate! 

El castaño movía su cuchillo curvo torpemente con su mano derecha, intentando de alguna manera alejar a su enemigo, que sin escuchar al Ackerman, lo tomó con su enorme mano para después alzarlo dos metros en el aire.

El Ackerman jamás se había imaginado un escenario así, uno donde alguien era más fuerte que él. Así que eso era un titán... Realmente existían...

Frente a Kenny, se encontraba un hombre de cabello gris, vestido con ropas de una tela fina,  con ojos de un color morado y en los cuáles se encontraban líneas brillantes, extendiéndose desde su pupila al final del iris.

Pero debajo de este, a partir de su torso, podía observarse una gran forma humanoide la cuál no tenía piernas, que exponía su columna, sus costillas y sus órganos internos. 

Y de la nuca, sobresalía aquel joven de ojos morados, con marcas profundas bajo los párpados y rodeado del vapor que desprendía el titán.

Rod: ¡Uri, detenlo ahí! ¡Yo me encargo ahora! *le gritó a su hermano mientras apuntaba a la cabeza de Kenny con un rifle*

Uri: ¡Espera Rod! Alguien del consejo debió contarle sobre nosotros. Debemos descubrir quién fue

Rod: ¡Pues usa tu poder para hacerlo hablar! *dijo aún apuntando al atacante*

Uri: No puedo hacerlo. Probablemente este sujeto es descendiente de los Ackermans. Y si ese es el caso, alza su espada contra mí por motivos personales

Kenny estaba asustado, era la primera vez que estaba en competa desventaja, no sabía como se libraría de esta. Y en un intento desesperado, tomó su cuchillo del filo para lanzarlo con toda su fuerza hacia el cuello de Uri Reiss. Pero este logró cubrirse con su brazo izquierdo, quedando con el cuchillo incrustado en su brazo

Rod: ¡Uri! ¡Si no lo matas tú lo haré yo, sólo déjalo en el aire!

Se le habían acabado las opciones, ya no tenía cómo defenderse. Por lo que el castaño recurrió a lo más bajo que se le ocurrió: Suplicar por su vida.

Kenny: ¡Maldición, perdóname! ¡Eres el auténtico rey! ¿No? ¡Suéltame, deja que me vaya! ¡Suéltame y dame otra oportunidad!

Frente a tal poder, el hombre se volvió débil. Era la primera vez en su vida que alguien podía matarlo con sólo un movimiento de sus dedos. Perdió el apoyo de la violencia y se quedó a merced del sujeto que había tratado de matar. 

¿Por qué lo había hecho en primer lugar? ¿Por qué atacar al rey de las Murallas? Ahora no lo sabía, parecía darse cuenta de que el rencor de su familia hacia la realeza no le importaba demasiado. Y en un inesperado acto, tras innumerables súplicas de Kenny cada vez más incoherentes, el titán bajó su mano y lo soltó en el pasto.

Kenny: M-Mis piernas 

Akuma No Kyojin [Tú en SNK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora