Capitulo 4: La maga oriental

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Había pasado una semana desde que Melissa se unió al gremio conmigo, se podría decir que ahora somos equipo, un equipo de dos personas.

Salimos de casa y nos dirigimos a la ciudad.

En el camino platicábamos normalmente; aproveche el momento y toque el tema de mudarnos a la ciudad, a ella le pareció buena la idea

Más que buena, le parecía una excelente idea, durante el resto del camino solamente hablaba de como quisiera que fuera la casa, de cómo la amueblaría y cosas por el estilo; me gustaba escucharla de vez en cuando.

Llegamos a la ciudad y nos dirigimos al gremio.

Mientras caminábamos por la calle que nos dirigía hacía el gremio me pareció ver a una mujer con un bastón en la mano, no, no era un bastón de ancianos, sino más bien, un bastón de magos.

Voltee a verla, se me hizo extraño ya que los magos no son muy comunes en esta parte del mundo.

La mujer no parecía mayor a 20 años, tenía el cabello de un color rosa claro, igual tenía una capa de color azul oscuro la cual iba desde los hombros hasta un poco más arriba de los talones, unos 20 centímetros tal vez, su ropa no pude verla por la capa.

Lo que más me sorprendió de ella fue su bastón de madera de aproximadamente 165 centímetros de altura, 10 centímetros más bajo que yo.

La punta del bastón estaba torcida circularmente y dentro de esta torcedura se encontraba una piedra mágica de color azul.

"¿Qué vez Adam?" (Melissa)

Al parecer Melissa se intrigo de mi acción y jaló de mi manga.

"Esa mujer, creo que es una maga ¿No?" (Adam)

"Lo más probable es que si, aunque es extraño, ya que no son muy comunes por aquí, pero, por lo que se, ellos son muy comunes en el oriente del mundo" (Melissa)

El oriente del mundo eh, entonces ese lugar sería la sede de los magos... Un momento...

"Melissa ¿Cómo sabes eso?" (Adam)

"La verdad no sé, solo lo sé, pero puede que tal vez lo haya escuchado de papá" (Melissa)

Puede ser, mi padre era un aventurero jubilado y puede que él lo sepa por haber viajado a tantos lugares del mundo.

No le di más vueltas al asunto y seguimos caminando hacia el gremio.

◊◊◊

Estábamos nuevamente en medio del bosque, bueno, más bien, al este de la ciudad.

Nuestra misión actual era aniquilar a un oso que estaba acabando con los cultivos de las personas que viven en la ciudad e incluso a dañado a personas.

Un oso negro rayado, una amenaza de rango bronce.

Así es, rango bronce, yo y Melissa ya habíamos subido un rango, no era mucho.

Según la misión, aquel oso se escondía al este de la ciudad, era de día y supuestamente a esta hora el oso salía comer los cultivos de los pobladores.

Nos sentamos en silencio para poder percibir de donde vendría el oso.

...

¡Groo!

El rugido sonó en frente de nosotros, nos levantamos de inmediato y sacamos nuestras armas, Melissa su arco y yo mi espada.

Nos pusimos en posición de combate.

¡PAM!

¡PAM!

Las pisadas del oso resonaban por todo el lugar, pisadas fuertes, pesadas y contundentes.

Los 6 héroes (Parte 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora