Voces Irrevocables

I. Nacer

El campo de batalla era furia. 

Dolor.  

Emociones que solo un guerrero sentiría cuando peleaba. Ya muchos, descansaban un eterno sueño. Las Valkirias elegían a aquellos hombres que viajarían al Valhalla. Los más valientes serían seleccionados. 

Eir, recorría el lugar buscando a los que podría sanar para que lucharan nuevamente. Había salvado a cinco, y deseaba profundamente auxiliar a más. 

Fue entonces, que captó susurros a lo lejos. Y mientras se aproximaba, descubrió a un joven que reposaba contra una roca. 

Poseía leves lesiones. No obstante, una flecha atravesaba su abdomen desnudo. 

Se arrodilló enfrente suyo. 

—Usted que es más hermosa que las estrellas, que la propia diosa Freyja. Vuestra sonrisa, que ilumina los días. Vuestros ojos como dos bellas flores —balbuceaba el malherido—. Vuestra alma tan pura que calma fijaría, cuando no encontrara consuelo en las densas noches. Le adoro, amada. Le amo sin saber de usted. Perdóneme no vivir como para admirar vuestra nueva luz. No pue… 

Eir, impresionada por los dulces elogios, se apresuró en curar la herida que le martirizaba, para permitirle vivir. La visión del hombre permanecía borrosa. No sabía si aquello era real, o que su ascenso al salón de los caídos sería pronto. 

Sin embargo, pudo recuperarse en menos de dos días. Y en cuanto tuvo la oportunidad, corrió con esmero de vuelta a su hogar. Donde su gentil esposa le esperaba junto a su bebé aguardando en su vientre. 

Y el joven, nunca supo lo que sucedió aquel día en realidad. Jamás se imaginó el malentendido que provocó por pronunciar al viento aquella dedicatoria a la verdadera señora de su corazón. 

Y es que aquel día, en aquella batalla… había enamorado con su inocente desahogo, a la encantadora e indulgente Eir, diosa de la sanación.    

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Muy buenas tengas todos, por aquí Cass.

Esta pequeña historia, está escrita para participar en el Concurso Dioses Nórdicos del perfil EditorialValhalla

Como verán, son cortos los capítulos y se encuentra en la categoría de Relato Corto. Entre los tres primeros capítulos según mi contador hay 693 palabras. Casi llego al límite que es 700.

¡Ah! Y el cuarto capítulo no es parte de la historia. Se trata más bien de toda la información que pude encontrar sobre esta Diosa para que ustedes también conozcan más de ella.

En realidad, me inscribí en dos categorías. La otra es Novela Juvenil y muy pronto estará publicada.

Bueno, dicho todo esto. Espero que les guste estas mini historias hechas con todo el amor e insomnio del mundo.

Besos miles,
Cassidy.