Capítulo 2

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Abro los ojos y lo primero que veo es el techo de mi habitación, mientras los sucesos del día anterior regresan a mi memoria, llevé mi mano derecha frente a mi rostro y diviso la marca en ella, un tridente bellamente decorado, que por alguna razón me da un sentimiento de nostalgia, es como encontrar algo que necesitabas pero no sabias que necesitabas; en la misma mano, en el dedo corazón, se encuentra el anillo de heredero, que cambiará al anillo de Lord en cuanto se cumplan los requisitos para serlo, el anillo está hecho de plata con una amatista incrustada con el escudo de la casa Black delicadamente tallado.

Levantándome de la cama me di cuenta de lo extremadamente bien que me siento, cuando me disponia a caminar hacia la puerta de mi cuarto escuche el *POP* característico de la aparición.

¡Amo Percy, Roxy le trajo un vaso con agua por si le daba sed, Roxy no esperaba que estuviera despierto tan temprano!- exclamó alegremente la fiel elfina.

Gracias Roxy- dije mientras agarraba el vaso, casi al instante el vaso se rompió e instintivamente traté de alcanzar los pedazos que caían, cuando de repente, se detuvieron a centímetros del suelo y levitaron hasta mi mano extendida en el que se reparó el vaso con el agua limpia dentro.

Vaya- se exaltó la elfina -¡el amo Percy es muy poderoso!- exclamó bulliciosamente mientras aplaudía emocionada.

¿Qué?- pregunte confundido -¿No lo hiciste tu?- la elfina solo nego con la cabeza, aunque se seguía notando el entusiasmo.

Ya veo- dije todavía confundido -será producto del ritual de herencia- deduje mientras tomaba el agua, mi magia debe estar descontrolada por el cambio.

El amo Percy debe ir a la sala de estar, Lady Black lo está esperando- avisó la pequeña.

Gracias Roxy- dije tranquilamente mientras retomé mi camino, esta vez hacia la sala.

Bajando las escaleras puedo empezar a divisar la habitación, suelo de mármol negro, paredes de color azul medianoche al igual que el techo, un ventanal en el techo encantado para ser irrompible y mantenerse limpio, una chimenea de gran tamaño con fuego encendido y frente a ella una mesa de té rodeada de 2 sofás, uno al lado contrario del otro y un sillón mirando hacia la chimenea.

En cada uno de los sillones se encontraba una persona, la primera la reconocí al instante, era mi madre que se encontraba con una mirada apacible en su rostro.
Al terminar de bajar las escaleras los ojos de mi madre se dirijen hacia mi con un sonrisa formándose en su rostro.

Percy, cariño, acercate, hay alguien que tienes que conocer- exclamó mamá con confianza, le obedecí y me acerque un poco confundido.

Ya estando cerca pude divisar al hombre que estaba frente a mi madre, era muy alto, alrededor de 2,5 metros, piel bronceada, musculos bien formados, cabello negro desordenado, proporciones perfectas, nariz pequeña, labios carnosos y lo mas excéntrico de su rostro eran sus ojos, el color de sus ojos cambiaba y se movía como olas en el mar, primero eran de un azul profundo para después cambiar a un verde agua, verde pantanoso, rojo, negro, etc.
Víste lo parece ser un kiton griego de color blanco con detalles en dorado, aretes de oro, collar de oro, brazaletes de oro tanto en muñecas como en tobillos y anillos de oro.

Su mirada se tornó un poco fría en cuanto se volteó a verme, lo que pondría nervioso a cualquiera, pero yo no soy cualquiera, yo soy Perseus Black, heredero de la noble y ancestral casa de los Black, y no me dejaría intimidar por un desconocido.

Le devolví la mirada, haciendo que el desconocido levante una ceja en señal de interés.

Hum- tarareó el hombre -siertamente tienes tu orgullo, eso es bueno, lo vas a necesitar- afirmó, su voz es profunda y armonionsa -sientate, hay mucho que explicar- dijo mientras señalaba con la mano el lugar al lado de mi madre.

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⏰ Última actualización: Aug 23, 2021 ⏰

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