De princesas y francesas

1.3K 63 0
                                    

-Está bien...-se acercó una chica y se situó al lado del castaño, antes de que se sentara justo al lado de su madre, que se había movido hasta la mesa de los leones-. Soy Dominique Ashley Weasley, un placer-sonrió de lado.

Se parecía muchísimo a la primera rubia, así que muchos dedujeron de quién era hija. Además el cerrado acento francés hacía que fuese obvio. Tenía el pelo rubio y los ojos grises, con un extraño aura que hacía que todo el mundo accediera a lo que ella quería. Llevaba una camiseta negra de tirantes, con una falda corta blanca, un abrigo del mismo color. Era la única, al menos de las mujeres descubiertas en todo el Comedor, que llevaba tacones, lo suficientemente altos para que su madre temiera por sus tobillos.

-Tengo 19, así que mi tiempo de estudio ya ha terminado-volvió a enseñar los dientes, haciendo que algún que otro chico soltara un agudo suspiro-. Mis padres son Bill y Fleur y mis padrinos tío George y tía... Su esposa-se corrigió en el último instante, mientras los dos hermanos se abrazaban.

>>No fui Gryffindor-señaló a la mesa-, ni Hufflepuff, ni Ravenclaw...-admitió haciendo tragar saliva a su padre y soltar un bufido al pequeño de los pelirrojos-. Tampoco Slytherin, tranquilízate papá-rió-. Antes me daría un ictus. Aún me cuesta aceptar que Albus sea una serpiente, mejor amigo de un hijo de una serpiente, amigo de hijos de serpientes-comenzó a darle un TIC en el ojo.

>> Mi madre quería que una de sus hijas fuese a Beauxbatons, como Vicky se opuso, me he convertido en la "princesita francesa"-continuó explicando-, la que nombras en plan bien. Cuando intenta burlar a alguien... Bueno, Lorcan antes lo ha dicho, la princesita francesa es mi hermano también.

>> Mis notas han sido... aceptables a lo largo de los siete años en la escuela, además este año he entrado como funcionaria en Le Ministère de la Magie, aunque estoy como enviada al Ministerio inglés, así que puedo pasar más tiempo con mi novio... Padres, os digo ahora que tengo novio, acordaos unos cuantos años-añadió-, aunque si pensaba ir como va a nuestro aniversario, no habrán maldiciones suficientes para él-lanzó una furibunda mirada hacia la mesa de los leones.

-Mira, ya lo he dicho, aún tenía que llegar a casa del entrenamiento y...-intentó excusarse Alexander, aunque dejando el final de la oración en el aire.

-Sí, sí...-asintió la rubia, no creyéndoselo del todo- Bah, no importa. Cuando mi padre se acuerde te va a dar una paliza igual-se encogió de un hombro, a lo que el chico miró en dirección al pelirrojo, con miedo.

>> Si no hay preguntas...

-¿De verdad ibas cada año a Francia?-preguntó curiosa el cerebro del Trío de Oro.

-Así es, Hermione-asintió-. Días antes del inicio de curso, organizábamos una comida en la Madriguera, para despedirme. Tranquilo, abuelo-se adelantó a su interrupción-, ahora está reformada. He de admitir que Luce y Rose son parecidas a las gemelas de Johnny Test, sólo que no son gemelas, sino primas, y tan solo una es pelirroja con gafas. Una serie muggle-aclaró ante la mirada confusa de algunos presentes-. El caso es que construyeron un par de robots muy raros que funcionaban como esos cacharros muggles ecologistas...

-Energía eólica, Nique.

-Eso-asintió-. El caso es que en menos de una semana la Madriguera era el doble de grande- parecía acelerada y nerviosa, con ganas de hacer más cosas a la vez que contar su vida de pie removiendo las manos-. ¿A qué venía esto? Ah sí, que cada año se hacía una comida donde nos reuníamos todos, algunos amigos, blá, blá, blá.

>> Bien, un par de horas más tarde, Vic, Lou y papá nos acompañaban al aeropuerto, y mamá y yo cogíamos un avión hasta París. Íbamos en tren hasta Reims, donde nos quedábamos con los abuelos hasta el uno de septiembre. Claro está, no nos apañábamos con los ordenadores, así que tía Audrey nos lo explicó el primer año y luego ya nos apañamos con la ayuda del pequeño genio muggle de la familia-los hombres Weasley, exceptuando a Bill y Arthur, se pusieron tensos y no acabaron de escucharlo. Tenían el primer nombre seguro de una de sus futuras esposas, sin embargo no la conocían.

>> Si no hay más preguntas-reanudó la presentación, esperando otra interrupción- supongo que la persona más indicada es...-se paró justo cuando las puertas se volvieron a abrir drásticamente y Percy Weasley entró tropezando. Se acercó hasta la mesa de Gryffindor y se volvió a sentar, aún más lejos de sus hermanos que la vez anterior. Nadie dijo nada hasta que Dominique sonrió y soltó:-Molly Emily Weasley-la mujer soltó una pequeña exclamación al escuchar su nombre y se sintió alagada, pero quería esa niña solo fuera hija de uno de los pelirrojos, al único al que por orgullo no abrazaría... en ese mismo instante. En ese caso, las cosas se resolverían, no debía preocuparse, pero si finalmente no era lo que ella esperaba...

-Bueno, pero mi segundo nombre no es Emily, Nique-sonrió de lado habiendo sustituido a su prima-, es Emmeline. Soy Molly Weasley II, un placer-hizo una reverencia teatral justo antes de quitarse la túnica.



Dominique Weasley es Leven Rambin

Stuck in 1996• HpWorldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora