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"¿ESTÁS FUERA DE TU MENTE?"

El apartamento de Sam y Bucky tenía una estricta política de no animales.

Bucky lo sabía, pero ¿le importaba? No. Cada semana era algo nuevo para él, pero hasta ahora, todo lo que traía a la casa era pequeño. Una vez fue una rana, que Sam se negó a tocar. En otra ocasión fue una serpiente, Sam gritó más fuerte de lo que Buckys lo había escuchado gritar antes. En otra ocasión, fue una araña lobo, Bucky lo hizo a propósito. Era molesto y lindo que Bucky trajera algo nuevo cada semana y le suplicara a Sam que le permitiera quedárselo. Cada vez, Sam decía que no y le recordaba a Bucky la regla de no animales. Cada vez, Bucky hacía pucheros y se alejaba lentamente para dejar al animal donde lo había encontrado.

Esta noche fue diferente. Bucky estaba fuera del apartamento en su caminata nocturna normal y no pudo evitar retroceder cuando escuchó un ruido en el callejón por el que pasó. Se paró en la entrada del callejón y escuchó, confirmando sus sospechas cuando se escuchó otro ruido. Entró lentamente, con la mano en el cuchillo que siempre llevaba encima y gritó.

"¿Hola?"

La respuesta que obtuvo no fue la que esperaba. Un pequeño 'maullido' es lo que obtuvo. Sacó su teléfono y encendió la linterna y la vista instantáneamente derritió su corazón. Era un pequeño gatito negro. Se arrodilló y le tendió la mano al gatito, quien con un pequeño problema se acercó a él y lo olió, frotando su cabeza con la mano de Bucky. Después de un rato, el gatito, a quien Bucky llamó Shadow, le permitió levantarla y Bucky casi lloró. ¡A la pobre gata le faltaban las patas delanteras!

Con un poco de inspección, Bucky se dio cuenta de que era un defecto de nacimiento y nada grave. Eso no significaba que no se sintiera mal por ella. Entonces, Bucky tomó la decisión ejecutiva de llevarse el gato a casa. Envolvió a Shadow en su chaqueta y regresó al apartamento. Fue fácil pasar por delante de la señora de la recepción, se aseguró de agradecer a Shadow por estar callado mientras subía las escaleras hasta su piso. La única persona por la que tenía que preocuparse era Sam.

Bucky abrió la puerta del apartamento y se encontró con un Sam molesto.

"¿Qué te tomó tanto tiempo?"

Bucky se encogió de hombros.

"Me atrapó con ... algo".

Shadow pensó que esa era su señal y sacó la cabeza de su chaqueta, dejando escapar un fuerte maullido. Bucky sonrió avergonzado y sacó a Shadow de su chaqueta.

"¿Sorpresa?"

"¡¿ESTÁS LOCO?!"

Shadow se escondió en la chaqueta de Bucky y Bucky la miró, consolando al gatito en sus brazos.

"¡La asustaste Sam!"

Sam levantó las manos y se alejó. Bucky lo siguió, viendo como Sam se sentaba en el sofá y ponía la cabeza entre las manos. Bucky se sentó en el suelo frente a él, con las piernas cruzadas.

"Explica Buck, ¿por qué trajiste al gato a casa?"

Bucky sacó lentamente a la Sombra de su chaqueta y la sostuvo.

"Mirar."

Sam suspiró y miró hacia arriba, su mirada se suavizó instantáneamente cuando notó que los gatos carecían de patas delanteras.

"Los propietarios se van a enojar, Buck".

Los ojos de Bucky se abrieron y una sonrisa apareció en su rostro. Sam no pudo evitar sonreírle a su novio.

"¿Asumo que ya la nombraste?"

El asintió.

"¡Su nombre es Shadow!"

"Bueno, ve a darle un baño a Shadow y luego ven a la cama. Averiguaremos si puedes quedarte con ella por la mañana ".

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⏰ Última actualización: Aug 06, 2021 ⏰

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