When the moon covers the sun

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Este One-shot está dedicado a cada una de esas personas que se han visto envueltas en la oscuridad, en la maldita depresión... Que sepan que siempre hay un destello en el camino, solo hay que saber hacia dónde mirar...

Un abrazo para todos ustedes, para los que han vencido, y para quienes continúan luchando.


No se rindan.

~*~

“When the moon covers the sun

It feels like I’m alone...”

Habían ganado y el castaño no podría sentirse más feliz.

Saltó, gritó y abrazó a sus compañeros, inmensamente agradecido porque, después de todo, fueron ellos los que los llevaron a la victoria definitiva, él solo fue un distracción en el momento que se necesitó, sin mencionar de lo ridícula que podría considerarse su participación...

Estaba profundamente feliz.

Cuando los llamaron a formar pudo ver el rostro brillante de su capitán, también el de Kuroko y Kagami, la luz y la sombra de Seirin.

La mirada del joven se desvió, siguiendo hacia donde se enfocó la del chico peliceleste, en el mismísimo Akashi Seijūrō.

Su rostro mostraba una sonrisa, se veía tranquilo o resignado, no sabría decir que encajaba mejor con aquella expresión en sus facciones. Probablemente él sintió la presión de los ojos avellana sobre su rostro, por lo que volteó y enlazó su mirada con la de Furihata, haciéndole bajar la cabeza avergonzado, lo cual no tardó en reflejarse en sus mejillas, las cuales terminaron pintadas de un intenso color carmín y sus piernas habían comenzado a temblar ligeramente.

— ¿Pasa algo, Furi? — la voz de Kagami le hizo reaccionar y negando rápidamente levantó la mirada hacia él y sonrió de forma deslumbrante. Una sonrisa que no pasó inadvertida para cierto par de ojos magenta.

~


"Behind my back I feel the phantom Like a nightmare, again, this repetitive pattern..."

La winter cup fue entregada a Seirin, gritos y celebraciones en el lugar, orgullo de todos aquellos que acompañaron a los chicos en la enorme travesía que los llevó hasta ese momento.

Una hora más tarde, estaban listos para irse, exhaustos por la experiencia y deseando llegar a casa y dormir, dormir por un mes si era posible.

Kouki había terminado de arreglar sus cosas, justo cuando vio pasar al equipo de Rakuzan quienes, al igual que su capitán, se veían tranquilos, pero un tanto desilusionados.

Por mera curiosidad se los quedó viendo, esperando ver pasar al pelirrojo, pero nada, al parecer no saldría con ellos, quizás se había quedado a terminar otras cosas.

— Responsabilidades del capitán.— comentó el castaño con una media sonrisa y cuando estaba por salir del lugar, un ruido de una puerta metálica abriéndose le llamó la atención y fue entonces que lo vio.

Akashi estaba cruzando esa puerta que llevaba a las escaleras, como una puerta de emergencia y solo por un instante, Kouki creyó ver un destello en su mejilla, ¿Una lágrima?

When the moon covers the sun || One-shotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora