De pañales y padres primerizos [Draken/Mikey]

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You are a dad Ken-chin!

Mikey observa las estrellas desde la ventana de su habitación, nunca les presto mucha atención pero sabe de algunas constelaciones debido a la boba etapa en la que Emma decidió que le interesaban.

Su grupo de amigos se fue hace unas horas después de desearle buenas noches y decirle que más le valía no llamar en medio de la noche pues el solo se había metido en el problema que implicaba ser padre, Mitsuya había sido el mas amable de todos llegando a preparar un poco de sopa recordándole que fuera cuidadoso al dormir con el niño.

No entendía porque decían eso, Kai no hacia mucho berrinche como se esperaría de un bebé recién nacido, se limitaba a llorar bajito y tomar su dedo con la mano mientras le daba apretones, tomaba su leche con muchas ganas y cuando llegaba al final de la botella seguía tratando de tomar, lo observo dormir en paz antes de volver su vista al patio de nuevo, la lluvia no había parado lo que le parecía extraño.

Suspiro antes de acostarse y dar un beso al anillo que descansaba en su dedo, un 'te amo' sin pronunciar que le recordaba que no estaría solo nunca mas, porque tenía a su Ken-chin, a su hijo y a un perro bastante listo para su propio bien.

Draken sonrío mientras observaba la playa desde el balcón de su habitación de hotel eran las tres de la mañana pero el seguía sin poder dormir, por algún motivo sentía que Mikey le tenía una sorpresa que terminaría amando demasiado, su corazón no dejaba de latir y sus manos picaban por lo que decidió estirar la mano derecha fuera del balcón para sentir como la lluvia se filtraba entre sus dedos.

La lluvia en Japón durante diciembre no era algo que sucediera de forma común, las lluvias eran mas de mayo o julio, una sonrisa tiro de sus labios sin que pudiera evitarlo, su vista cayo en el anillo de plata que descansaba en su dedo, Draken había cumplido su promesa y le había dado un anillo a Mikey junto a todo su amor, era una simple banda lisa que tenía una serie de piedras incrustadas por el medio, era simple e igual al de Mikey pero por dentro tenía unas gotas de lluvia mientras que el de Mikey tenía una pequeña nube, la lluvia había sido algo importante en su relación con el menor.

La primera vez que se dio cuenta que tal vez sentía algo diferente por Mikey fue cuando se quedaron atrapados en una parada de autobús debido a la lluvia, él se había quitado su chaqueta y se la había arrojado antes de agacharse y dejar que Manjiro se subiera a su espalda para llevarlo cargando hasta su casa, la forma en que Mikey se aferraba a su espalda mientras reía e intentaba taparlos con su chaqueta hizo que sintiera ganas de golpear a alguien.

Puede que si golpeara a alguien mientras caminaba hacia su casa.

Ambos dieron su primer beso un día de lluvia cuando el tenía quince y Mikey catorce recién cumplidos, Mikey había insistido en jugar en la lluvia como regalo de cumpleaños y el había aceptado incluso si ya tenía un regalo preparado para el menor, acepto y se pasaron horas persiguiendo al otro bajo la lluvia, Mikey se había enfermado y el lo había visitado con una bolsa llena de dulces, Manjiro estaba dormido y el había tomado el valor para dejar un beso suave en sus labios para después salir corriendo.