Zwent. /Ereri, Shingeki no Kyojin, Yaoi gay.

3 - Mentiras piadosas.

 Frente a ti es fácil ser sincero, lo quiera o no lo quiera, no tengo otra manera. Dime qué hiciste, dime qué cambio dentro de mí, para cruzar la línea entre tú y yo, la que me convenció.  No fue difícil encontrar la calma, le hablaste a mi alma donde dormía la verdad.

Tu mirada en mi – Ha Ash.

Siento la brisa recorrer toda mi cara, me siento como un perro, pero la sensación es fantástica, Armin va manejando el auto y yo disfruto de la bonita mañana. De pronto recuerdo lo que paso el día anterior con Levi y mi estomago se revuelve, también pienso en Mikasa y siento como si la estuviera engañando, aunque no lo estoy haciendo, por eso rechacé a Levi.

-Llegamos Eren – Dijo Armin apagando el auto.

-Mmm… si – Baje del auto con mis cosas al igual que Armin.

Empezamos a caminar hacia la entrada.

-Oye Eren, has estado muy distraído – Dijo mirando al frente. - ¿Es por lo de ayer, cierto?

-Si…

-Descuida, todo estará bien. – Me dedico una sonrisa que correspondí.

Entre al salón de clase, había pocos alumnos, decidí planear bien que hacer este día en las clases. Después de leer las opciones que tenia elegí “hacer equipos y crear una presentación musical”, eso sonaba bien, en equipos harán una presentación demostrando lo que saben, ellos ya son alumnos avanzados, al menos lo básico lo saben, saben lo suficiente para tocar instrumentos y convertirlos en canción.

Una vez que inicio la clase di la información a los jóvenes, estuvieron encantados con la idea y rápidamente hicieron sus equipos de cuatro personas. Hanji la chica de los lentes, se acerco a mí.

-Disculpe… - Dijo.

-¿Si?

-Amm… como vera en nuestro equipo solo hay tres personas, porque una de ellas falto – Dijo apuntando a sus amigos - ¿Lo podemos integrar aun así?

-Claro. – Sonreí.

-¡Gracias!

Era cierto, Levi hoy no vino a clases ¿Sera por lo de ayer?, no tiene sentido, ese chico es raro.

-Bien chicos este proyecto es para el lunes de la próxima semana ¡suerte! – Dije antes de que dieran el timbre indicando la salida.

Los chicos salieron en fuga, yo con calma tome mis cosas y salí.