Suspiré con nerviosismo al estar frente a aquel escenario, miré al rededor y el burdel se encontraba bastante lleno hoy, era imposible que no lo esté, estaba ella, no sabía su nombre real ya que siempre que la presentaban mencionaban un seudónimo, pero había llamado mi atención desde la primera vez que la había visto bailar con aquellas prendas diminutas, cómo su cuerpo se movia de forma tan erotica al ritmo de la música.Apenas terminó su acto uno de los guardias me acompañó a la parte posterior del burdel, ahí estaba, caminando por ese largo pasillo con luces rojas, se escuchaban gemidos detrás de esas puertas, sentía mi corazón y mi vagina latir con fuerza con cada paso que daba, pronto la tendría solo para mi, cada vez estaba más cerca de llegar.
Subí al ascensor junto a dos guardias vestidos totalmente de negro, se notaba que se ejercitaban seguido, al parecer tenían bastante cuidado con ella, y era lógico, "Sasha" era la más popular de todo el burdel, sus shows eran los más llenos, y no era para poco, aquella pelirroja era perfecta, tenía un busto que no entraría en mis manos, sus caderas eran anchas y perfectamente torneadas al igual que sus muslos, tenía unas piernas preciosas, su cintura era diminuta, y su largo cabello rojo con ondas era el toque final, cada parte de ella creaba esa mezcla de seducción perfecta, sus movimientos eran hipnotizantes, era perfecta, atraía hombres y mujeres, y claramente se pagaba mucho por estar un rato a solas con ella.
Había fantaseado miles de veces con ella, "Sasha" era la dueña e inspiración de todos los orgasmos que tuve últimamente, de todos esos sueños húmedos.
- Aquí es, ella ya está dentro. - Dijo aquel guardia que me doblaba la estatura, sacándome de mi trance, abrió la puerta de una habitación enorme y cerró la puerta tras de mí apenas entré.
Inhale con ansias y observé toda la habitación al rededor, era enorme, se notaba que era la mejor del lugar, tenía varias puertas, supongo que eran las secciones temáticas, sadomasoquismo, escolares, etc. seguía recorriendo la habitación hasta adentrarme más y encontrar una cama enorme, empecé a quitarme la ropa hasta quedar en ropa interior, justo cuando iba a sacarmela escuché cómo de una puerta a la derecha salió aquella diosa con la cual había fantaseado muchas veces.
Tenia el cabello rojo y perfectas ondas que caían cubriendo parte de sus senos, dios, sus senos eran perfectos, si intentaba ponerlos en mis manos no cabrían por completo, su cintura era delgada y su abdomen plano, sus caderas anchas y sus piernas perfectamente torneadas.
Me senté sobre la cama viendo a aquella diosa desnuda frente a mí que me escaneaba con la mirada y sonreía característicamente coqueta, yo estaba completamente embelezada, y mi corazón no era lo unico que palpitaba, era mil veces mejor frente a mí. Se acercó con suavidad a mí y se colocó sobre mi regazo, ella dio el primer paso, tomó mis manos y los llevó a sus pechos.
- No sólo te quedes mirándolas, ahora puedes tocarlas - Murmuró con una sonrisa picara y provocadora, mientras ella desabotonaba mi brasier y lo quitaba, le hice caso y empecé a amasarlos con suavidad, ella comenzó a gemir y poco a poco comenzó a mover sus caderas sobre mis piernas, comenzando a mojarlas en el proceso, sentía cómo su vagina se frotaba contra mi piel, humedesiendola, mientras sus manos acariciaban mi nuca.
Elevé mi rostro para intentar besar sus labios y ella empujó mi rostro al medio de sus pechos. - Aaah~ ¡Chúpalos!~ ¡Son tuyos! - Gimió mientras los movía frente a mi rostro, sin dudarlo empecé a chupar sus pezones intercaladamente, sintiendo la suavidad de sus pechos sobre mi rostro, era un sueño hecho realidad,
- Por favor, déjame hacerte un oral.
Pedí mirándola a los ojos con la respiración agitada. La comisura izquierda de sus labios se elevó haciendola ver más sexy aún, me recostó por completo con un empujón haciendo que mi espalda choque contra el colchón, gateó sobre mi cuerpo hasta poder sentarse sobre mi rostro, la tenía sobre mi rostro, sus labios vaginales cerca de mi boca y si elevaba la vista podía ver sus tetas a la perfección.
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Relatos y Deseos Eróticos Lesbicos
RandomLee y haz que tu imaginación vuele para que tu cuerpo lo disfrute.