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╰┈➤‣ꉂ›꒰ やれ やれ、もう終わったの?
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━━ AU Inspirado en las tres primeras temporadas de " La desastrosa vida de Saiki K."
━━ Oliver Sallow, William Lockbird, Rumi Kurakawa, Agatha Van Weber, ent...
Tener poder psíquicos hace lo posible imposible. Pero a la vez es lo peor que te puede pasar.
Me llamo Haru Hideki, y tengo poderes psíquicos.
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Hace dieciséis años, una pareja normal tuvo un hijo que no tenía un pelo de normal.
- Tiene tu cara de enfado.
- Tiene tu cara de no juntar ni dos neuronas.
- ¿Entonces, me quedo con solo la parte mala de ambos?
Tenía dos meses cuando empecé a hablar, sin siquiera usar la voz, pero ahí no terminaría. Cuándo tenía un mes, empecé a correr en el aire, molestando inexplicablemente a mi madre. Con un año me teletransporté a la otra parte del mundo porque no aguantaba más gritos.
Siempre había estado mi madre preocupada por mí, no de una manera maternal, sino de molestarse por aquellas habilidades, mientras que por aquel entonces mi padre ya no estaba en casa, pero decidió igualmente dejarlo así. Es insufriblemente floja y tampoco parece prestarme la necesaria atención.
El tiempo pasó y ese niño creció, convirtiéndose en un estudiante de instituto. Por mi pequeño relato, tengo poderes. Puedo doblar cucharas sin tocarlas, yo elijo si gano o pierdo. Mi vida parece un sueño, ¿cierto?
No lo es en ningún sentido.
¿Para qué quiero yo cucharas dobladas? ¿Y ganar el qué? Si fuese la lotería, no vería ni un céntimo y llamaría la atención.
Soy la persona más infeliz del mundo. Me lo han arrebatado absolutamente todo.
Telepatía, psicoquinesis, ver a través de objetos, presentimientos, clarividencia, teletransporte, etc.
¿Pero yo para qué quiero tanta cosa?
Un intercambio equivalente: me han dado todos estas cargas a cambio de quitarme cosas comunes.
No puedo ser feliz, no puedo ser sorprendido, no puedo sentir una hazaña por mí mismo. Son cosas que se me han robado, injustificadamente. No me enfado o entristezco, pero tampoco me alegro o emociono.
Esa es mi vida.
Dicho todo esto, no tengo motivos para quejarme. Mi madre me deja tranquilo desde hace años, así que tengo una vida familiar estable y tranquila. La casa es mía, por lo que siempre está en silencio. Una vida pacífica no es tan desagradable.
Pacífica, obviando las personas que lamentablemente a veces me rodean.
