Papá Por XX Días

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Alemania: -toma una caja que estaba en el ático para bajarla con cuidado mostrando un nombre con plumón negro "Cosas de Ale y Can", bajo a la segunda planta con el hoja de maple y el bebito que dormía tranquilamente en su carriola- Mira Canie encontré la caja que buscábamos

Canadá: ¿Dónde estaba? Por mas que trate de encontrarla no pude -se sentó en el sillón al lado de su esposo-

Alemania: en el ático, pero estaba atrás de otra por eso no se veía -tomó un cuter para abrirla por donde el Diurex lo unía por ambas orejas de la caja- no creí que enserio siguieran intactas las cosas -saco unas cuantas ropitas desdoblándolas para verlas mejor-

Canadá: Ale amor mira -tomó entre sus manos el erizo que tenia algo de polvo- tu erizo sigue con viva jaja ¿lo recuerdas?

Alemania: -lo tomó para verlos mejor causándole una sonrisa tierna- si lo recuerdo Canie, tú me lo compraste por que te lo pedí eso creo

Canadá: no importa, si quieres lo puedo lavar junto con toda la ropa esta buena y además nos puede servir para cuando nuestro nene crezca -se puso al lado del alemán para besar su mejilla- o no se que planees hacer con el erizo

Alemania: no quiero deshacerme de él, es demasiado importante para mi -vuelve a dejar la ropita en la caja junto con el erizo- puede que el bebé lo quiera o si no pueda que lo deje en la mesita de noche como recuerdo -tomó la caja entre sus manos para irse junto al canadiense para ir a lavar las cosas pero los llantos de su pequeño los interrumpió deteniendo su caminata- yo puedo ir a dejar las cosas quédate con el nene -se fue dejando solo al bicolor-

Canadá: ok amor -fue donde estaba la carriola para cargar al bebé y tratar de calmarlo- no llores mi niño, ¿tienes hambre? -acercó su dedo a la boquita del bebé para aclarar lo dicho, al momento que él nene siente el dedo de su papá lo comienza a succionar- eso es un si. Bien vamos a por tu mamila con leche para que comas algo -no despego su dedo del pequeño alemán-canadiense para evitar que llorara-

Alemania regresó mirando a su esposo tratando de hacer que su hijo sacara el aire en lo que preparaba la comida, por lo que fue donde él para cargarlo y que Canadá no tuviera problema en hacer la comida; Ale daba pequeños golpes en la espalda del bebé para sacar el aire, en cuanto este eructo dejo salir algo de vómito en el hombro del mayor, Canadá al verlo soltó una carcajada contagiando al pequeño el alemán tomó un trapo para limpiar aquella zona.

Dejo de nuevo al bebé en la carriola ya dormido profundamente, regresó a donde estaba su esposo para ayudarlo con la comida y esas cosas.

Llegó la noche donde tenían que bañar al heredero de Alemania y Canadá, prepararon las cosas dejándolas en la cama. Desvistieron al pequeño dejándolo como Diosito lo trajo al mundo (y no es llorando y en contra de su voluntad) metiéndolo a la tina de un tamaño mediano para mojar su cabecita con agua ni tan fría ni tan caliente quien lo bañaba era el mayor mientras el canadiense metía la ropa a su lugar dejando únicamente el mameluco de su hijo que era de un zorro muy tierno, una vez llegó el alemán con el bebé riendo envuelto en una toalla dejándolo en la cama recostado siguiendo con su risa, Canadá lo secó perfectamente para ponerle cremita para evitar que se le resecara su piel, una vez terminando le puso su mameluco que se lo regaló su tío USA, lo recostó en la cuna para irse con Alemania y "bañarse" juntos.




A las 2:37 de la madrugada el bebé despertó llorando ocasionando que sus papás se les quitara el sueño, Alemania prendió la luz para ir donde su nene para cargarlo y mecerlo para que durmiera pero no paraba de llorar Canadá optó por acostarlo en medio de ellos y así fue luego de unos 20 minutos quedó muy dormido, apagaron las luces para seguir durmiendo.

Cortos AlecanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora