III. Una Buena Idea

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En la noche, justo fuera de casa de Hikaru, una misteriosa figura se acerca a la puerta, antes de abrirla se detiene a pensar "esto es una mala idea... Pero no puede haber testigos".

Hikaru, recostada en su cama, mirando el techo de su cuarto, pensando en la misteriosa figura que miro en su cocina y la extraña reunión que tuvo con el empresario Stattam, piensa "es bueno que se interese en mis estudios, Pero es... extraño" después se levanta de modo que queda sentada al pie de la cama "mas extraño es esa persona en mi cocina, Debería... Llamarlo" mientras lo piensa saca de un cajón ubicado debajo de su cama, la tarjeta con los números fosforescentes que le dejo aquel individuo, con su otra mano, alcanza su celular y comienza a marcar el misterioso número "no creo que deba, no es buena idea" piensa "mejor en otro momento", se levanta de su cama y deja el celular en su escritorio donde esta el monitor de su avanzada computadora y sale de su cuarto dirigiéndose al baño que esta frente a su habitación, guardando la tarjeta en uno de sus bolsillos.

El individuo entra a la casa de Hikaru dirigiéndose a la sala de estar "que bonita casa para alguien que vive sola" piensa el individuo mientras se sienta en uno de los sillones de la sala "es cómodo... Demasiado" piensa mientras con sus manos toca los cojines del sofá estrujandolo suavemente.

Hikaru, al salir del baño baja las escaleras, va a la cocina y saca de su refrigerador un postre de helado y galleta y camina hacia la sala de estar mientras come su postre, al llegar al marco de la entrada de la sala se detiene al ver una sombra recostada en su sofá y deja de masticar.
- ¿Hola?...- pregunta temerosa al ver la brumosa sombra.
La sombra saca rápidamente un arma que solo se ilumina ligeramente por la luz de fuera que se cuela entre las cortinas de la ventana cercana a la sala de estar, Hikaru se agacha casi al mismo tiempo que dispara tres vez la sombra.
arrastrándose por las escaleras sube rápidamente entrando al baño, cerrando rápidamente la puerta, mientras la sombra disparando, persigue a Hikaru deteniéndose al pie de las escaleras.

- Esta vez no entre por la puerta trasera-
Hikaru en la tina de la bañera, aterrada y temblorosa por la adrenalina saca de su bolsillo la tarjeta "Mierda! No puede ser posible que sea el mismo tipo" piensa mientras sale de la bañera "¿qué hago?" Se dice a si misma.
- No tengo todo el día y lamento tener que hacer esto, es parte del trabajo
Hikaru al escuchar al individuo sabe que no tiene opción "pelear o morir" piensa.
Decidida, toma varias toallas y varios rollos de papel colocando una de puntas de cada toalla en el orificio de los rollos de papel.
- Voy a entrar, espero ya hallas terminado, haría lo mismo si me pasara en mi casa- dice el individuo mientras pone un pie en el primer escalón, en el momento en que avanza el individuo Hikaru sale rápidamente del baño lanzando las toallas con el papel al mismo tiempo distrayendo al individuo y saltando a la puerta de su habitación.

El individuo manotea para quitarse las toallas y el papel que cayeron en su cabeza bloqueando su vista lo que provoca que suelte su arma.
- No puedo creer que funcionara- dice Hikaru sorprendida mirando por la orilla de la puerta
- Tuviste suerte! -dice el individuo tratando de quitarse las toallas y el papel enredado en su cabeza.
Hikaru dirigiéndose a su armario al fondo de su habitación donde esta guardado su Arco, lo toma junto con su carcaj que solo tiene un par de flechas mientras el individuo esta distraído.
Finalmente el intruso se libera de la distracción, toma su arma y dispara dos veces en dirección a la habitación.

Hikaru se tira al suelo evitando las balas, toma su arco, lo tensa, piensa un momento "solo dos flechas, maldición debí de practicar tiro deportivo con armas" apunta a un cuadro con una foto de su graduación de preparatoria y suelta la flecha.

La flecha rebota en las paredes cercanas a las escaleras haciendo que golpee la cabeza del intruso.
- Buen tiro!- dice el intruso - que bien que tenga casco!-
Mientras hablaba apuntaba su mira al angulo de donde salio la flecha, al mismo tiempo Hikaru preparaba su última flecha apuntando al mismo lugar que disparó anteriormente "has que cuente" piensa, detenidamente observa el cuadro al que disparo, caminando al fondo de su habitación, comienza a correr tomando impulso, se desliza por el suelo pasando de su habitación al baño, mirando rápido y borroso su objetivo, suelta la flecha antes de entrar al baño.

El Fraude del SándwichDonde viven las historias. Descúbrelo ahora