Il possibile incontro (El posible encuentro)

60 2 0
                                    

Mi casa no era ninguna maravilla. Nos camuflábamos en los barrios bajos pero teníamos gran poder adquisitivo y material. Llegué y me fui a mi cuarto, allí tenía todas mis posesiones. Me pasé la tarde tumbado en la cama leyendo el periódico para ver si ponía algo de mi padre, no vi nada en especial pero sí que salía una biografía suya, era conocido por todo el mundo y todos sabían su nombre pero a la vez nadie conocía quien era. Era como un fantasma en la sombra. Tenía sueño y era bastante tarde, cené de lo que había por casa casi mendigando y me fui a dormir. Era viernes 27 hacía dos días que mi padre había muerto, era hora de ir a su funeral, no quise que mucha gente fuera o lo supiera más que nada por seguridad pero apareció poca gente, entre los asistentes Cesáreo y Crisanto, mis actuales y antiguos ayudantes de mi padre y familiares lejanos. No había ninguna mujer eran todos hombres cosa que me pareció rara ya que no estaba ni mi supuesta y desconocida madre pero a la vez tampoco había ninguna mujer de los asistentes. Salimos y allí estaba una joven de unos 15 años guapa hermosa pero, ¿quién sería? Espere a que se fuera todo el mundo y vi que se fue sola no la conocía y seguramente nunca la conocería. Volví a mi casa y vi una nota en la puerta. Era una nota de mi tío Paolo, era quién se suponía que tenía mi manutención en el orfanato pero al decidir vivir solo él no lo sabía. La nota decía:
     Marco, soy tu tío Paolo, desde el orfanato me han enviado esta carta. Por favor no te la juegues eres el punto de mira de la mafia italiana, con once años eres solo un niño por favor ten cuidado.
Estimado Paolo Gianluigi:
Marco ha desaparecido del orfanato, hace tres días que no va a clase y no sabemos nada de él. Estamos preocupados por el joven no tenemos contacto con el joven, le hacemos saber esto por su seguridad. Le informaremos si tenemos nuevas noticias.
Atentamente,
              Orfanato Alexandros”
Rápidamente pensé -¿se piensan que voy a volver? No les falta fe-. Ya volveré cuando esté desesperado.
Miraba por la ventana y vi a la misma chica, corrí a ver si la encontraba pero estaba en el fondo de la calle, demasiado lejos y la vi entrar en una casa. ¿Podría ser la suya? Mañana será hora de comprobarlo.

La Vecchia SignoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora