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Después de la última experiencia con el estofado, los tres miembros de la banda ya hartos del chile decidieron que no dejarían que Russel fuera a hacer las compras solo. En esta ocasión fueron todos al COSTCO® y por órdenes de Murdoc no dejarían que el baterista comprara ni semillas de chile. Iban siguiendo a Russel detrás mientras recorrían los pasillos, con el ojo bien puesto encima de él como paranoicos.

Primero pasaron por la sección de lácteos, cereales, artículos para el hogar, hasta que llegaron a frutas y verduras. Russel se acercó ansioso al stand de los chiles y ¡estaban en oferta! —¿Cuál llevaré, chicos? -Tomo un gran puño de chile entre sus manos, en éxtasis, sintiendo la textura y cuidando que no estuvieran echados a perder. —Hay pimiento morrón, chile serrano, chile pasilla, chile morito, chile manzano, chile jalapeño, chile de árbol...-Se le estaba haciendo agua la boca.

Noodle se mordisquea las uñas mientras piensa en algo. —¡Ah, mira, Russel! ¡Es Beyoncé!

—¡¿Dónde ?!-Russel voltea, y en su distracción, Murdoc aprovecha y cambia el letrero de oferta.

—Ah, olvidalo, me confundí. No, no era ella, no.

—Que lastima. Amo a Beyoncé.-Russel vuelve a mirar el precio y casi se le salen los ojos al ver que estaba muy caro.—Creí ver que costaban menos.

—¡Lastima, amigo! -Dice Murdoc. —Mejor vamos ya a pagar todo, esto es demasiado caro, no podemos pagarlo ahora.

—¡Vámonos, Russ! -Anima 2D. Arrastran a Russel lejos de su sección favorita y se alejan mientras el neoyorkino se despide con ojos de cachorrito.

Ya estando en cajas, Russel saca su tarjeta de membresía ante la amable cajera. —¿Encontraron todo lo que buscabaaaan?

—Sí, no. La verdad es que no. -Comenta un Russel muy deprimido. —¡Los chiles son muy caros aquí! ¿Por qué no pueden darlos más baratos? Quería llevarme varios.

—¡Oh, pero sí lo están, señor! Hoy es miércoles de frutas y verduras y los chiles tienen un precio especial.

—¿En serio? Vi el letrero. Es una broma si creen que pagaré ese precio.

—Espere, por favor, ya mando a alguien a verificar eso. -Mientras la cajera voceaba al personal de COSTCO®, Murdoc y 2D salieron corriendo escabulléndose entre las cajas y pasillos y volviendo a la sección de chiles.

—¡Empuja esta cosa, tenemos que desaparecerla, Faceache! -Ordena el mayor.

—¡Ay, ay, no puedo, estoy bien menso! -Con todas sus fuerzas tuvieron que mover el stand completo y ocultarlo en una sala donde solo el staff autorizado puede entrar. Cuando vieron otra vez, Russel estaba ahí parado buscando los chiles.

—Que raro, pensé que estaban aquí.

—Que mal, resulta que, sí estaban en oferta, vinimos a buscar, pero ¿qué crees? Se acabaron. -Dice Murdoc.

—Sí, sí. Nada, ya no hay nada. Ni un solo chile. -Dice 2D fingiendo tristeza.

Con mucha "decepción", (salvo por Russ que en serio sí estaba triste) regresan a las cajas. —Se acabó. ¡Todo se acabóóó! -Se lamenta el afroamericano.

—¡Lamento oír eso! ¡Nuestros productos vuelan! Tenemos los mejores descuentos, no me extraña que la gente se los llevara todos. -Dice la cajera. —Pero tengo una alternativa para usted, ¡le ofrezco estas latas gigantes de chiles en vinagre, con zanahoria y cebolla!

—¡Ohhhh! ¡Como no las vi antes!

—¡Están al 3x2! Y si se las lleva en el próximo minuto, participa para ganar una dotación de por vida...

—¡III-aaahhh! -Noodle le lanza una patada giratoria voladora justo a la cara para hacerla caer desmayada. —¡Cállese, vieja zorra! -La banda actúa rápido para taparle los ojos a Russel y literal secuestrarlo y sacarlo fuera del COSTCO®. En el camino le hacen oler cloroformo para desmayarlo.

Cuando vuelve en sí, se encuentran en casa. Russel tirado en el sillón. Se quita la venda de los ojos. —Chicos, ¿Qué pasó? ¿No estábamos en el COSTCO® comprando?

—¿En el COSTCO®? ¿De qué hablas, Russ? No hemos salido de aquí en todo el día. -Dice Noodle.

—Así es, amigo, ¿o acaso vez alguna compra de COSTCO® por aquí? -Pregunta Murdoc. (Y es verdad porque todo lo dejaron abandonado allá, en el carrito, cuando salieron huyendo).

—Debió haber sido un sueño. -Responde entonces. —¡Pero un sueño maravilloso! Soñé que todo el chile estaba en oferta y luego desaparecía. Y ustedes me decían que la gente se lo llevó todo. Y luego la cajera me ofrecía una dotación de latas gigantes de chile de por vida. Fue hermoso, luego desperté.

—Mas bien parece una pesadilla. -Dice la chica en voz baja.

—Bueno, aquí se termina este capítulo, ¿no? Solo espero que no nos demanden por mencionar a COSTCO® muchas veces. -Dice 2D.

A Russel le gusta el chile Donde viven las historias. Descúbrelo ahora