-Eʟ ᴄᴀ́ʟɪᴢ ᴅᴇ ғᴜᴇɢᴏ

450 23 57
                                    

—¡Su atención por favor!—llamó Dumbledore—Quisiera decir unas palabras

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¡Su atención por favor!—llamó Dumbledore—Quisiera decir unas palabras. La gloria eterna, es lo que le espera al estudiante que gane el torneo de los cuatro magos. Pero para lograrlo deberá pasar por tres pruebas, en extremo riesgosas. Por esta razón el ministerio decidió aplicar una nueva regla. Para explicar todo esto, tenemos al director de departamento de cooperación mágica e internacional. El señor Bartemious Crouch

Unos rayos invadieron el gran comedor, el techo los desprendía

Un señor que Ginny reconoció como Alastor Moody, o como lo llamaban Ojo loco Moody. Lanzó un hechizo al techo del comedor y este se reparó

—¿Ya vieron? Es ojo loco Moody—dijo Ron, al igual que todos, mirando al ex auror

—¿Alastor Moody? ¿El cazador?—preguntó Hermione

—¿Cazador?—al parecer los demás, al igual que Dean, tampoco sabían mucho de el

—De magos tenebrosos. Por el las celdas de Azkaban están repletas. Dicen que ya está completamente loco—respondió Ron

Alastor se pasó por la mesa de profesores y llegó hasta Dumbledore

—Oh, mi querido amigo. Gracias por venir—saludó el director

—Estupido techo—reclamó el de ojo de vidrio

Moody se volteó y empezó a beber algo de su frasco

—¿Qué creen que esté bebiendo?—preguntó Seamus

—No creo que sea jugo de calabaza—miró Harry

—Después de un largo análisis—empezó Barty—El Ministerio decidió que por su seguridad. A ningún estudiante menor de diecisiete años, se le permitirá colocar su nombre en el cáliz

Después del mini discurso, muchos estudiantes empezaron a protestar

—¡Eso es injusto!

—¡Qué cosa!

—¡No puede ser!

—¡Eso es basura!—gritaron los gemelos

—¡Silencio!—la voz de Dumbledore hizo que todos se callen

Con su varita, el director hizo desaparecer lo que cubría el cáliz

Cuando estuvo del todo libre, el cáliz emitió unas llamas azules

—El cáliz de fuego, quien desee participar en el torneo, solo debe escribir su nombre en un pedazo de pergamino y lanzarlo a la llama antes del jueves a esta hora. Piensen con mucho cuidado, de ser elegidos ya no hay escapatoria. En este momento, ¡El torneo de los cuatro magos da comienzo!—dijo Dumbledore

—Alastor Moody—se presentó en el salón de—Ex cazador, Ministro inconforme, y su maestro de Defensa Contra Las Artes Oscuras. Vine porque Dumbledore me lo pidió, fin de la historia, se acabó ¡Adiós! ¿Preguntas?

³𝙶𝚒𝚗𝚗𝚢 𝚢 𝚎𝚕 𝚌𝚊́𝚕𝚒𝚣 𝚍𝚎 𝚏𝚞𝚎𝚐𝚘 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora