-Vᴀᴄᴀᴄɪᴏɴᴇs

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—Ronnie

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—Ronnie...—Ginny entró al cuarto de Ron, sin tocar, porque el nunca lo hacía en el suyo—¿Qué demonios...?

—Esto...yo, lo estaba haciendo para ti—se excusó el pelirrojo, rascando su nuca

Ron estaba lleno de pintura, toda su cara y ropa manchada de colores, despeinado y con todo su cuarto desordenado, igual de manchado

—¿Estabas pintando al estilo muggle?—preguntó enternecida

—Sabía que te gustaba y bueno, traté de hacerlo—agarró una brocha y jugó con ella dándole vueltas—Pero no sé nada de eso, solo logré desordenar y machar todo

Ginny inspeccionó el lugar—Aún así es un tierno gesto de tu parte. No tenías que hacerlo

—Pero quería, pensé que te podría alegrar un poco...

—Ven aquí—abrazó a Ron, eran muy unidos y se querían demasiado, Ginny tenía mucha suerte de tenerlo con ella—Vamos a hacerlo juntos

—Espera—paró el pelirrojo separándose de su hermana—Creo que hice algo, mira

Ginny se acercó al lienzo, no eran más que unas manchas de colores sin orden específico alguno—Si...lo veo, es un lindo...pollito—trató de adivinar

Ron suspiró cansado—Era un halcón

—Ah...yo—se volvió a girar—Si, un águila, digo halcón, si...puedo ver más su forma, también le veo las ¿Garras?

—Déjalo, es inútil. Pintemos juntos mejor

Sonrieron y ambos tomaron una brocha, Ginny puso otro lienzo y tomó las pinturas, ayudó a Ron en lo que pueda para que no haga más desastre

Cuando acabaron ambos ladearon la cabeza, tratando de encontrarle sentido a lo que hicieron

—Es...—empezó Ron con una mueca—¿Un elefante naranja con una mancha semi naranja?

—Creo que es...un paisaje naranja con algo entre marrón y naranja—respondió Ginny igual de confundida—No, no tiene sentido. Solo son un montón de manchas

—Lamento haberlo arruinado—dijo Ron nervioso—Tú eres la que sabe de eso, yo no

—No tienes la culpa, ninguno sabe lo que es pero nos quedó bien. Además nos divertimos haciéndolo—sonrió la muchacha—Ahora ve a bañarte mientras yo limpio este desastre

—Si, mamá—bromeó el pelirrojo

—Ay, ya vete—rodó los ojos

—Te quiere, Charlie—terminó de leer la carta que su hermano le había mandado para luego soltar un gritito y saltar de felicidad

Abrió la caja y vio en su interior, habían un montón de fotos que Charlie había tomado en Rumania, y ademas una nueva cámara para que Ginny tomará las fotos que quisiera y las cuelgue en su pared

³𝙶𝚒𝚗𝚗𝚢 𝚢 𝚎𝚕 𝚌𝚊́𝚕𝚒𝚣 𝚍𝚎 𝚏𝚞𝚎𝚐𝚘 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora