El diario de Chris

Día 16

30 de julio del 2018

Ok, no lo niego, Caleb es interesante, muy peculiar a decir verdad, hoy, por mera curiosidad le puse un poco, solo un poco de atención, no solo lo escuchaba hablar sin parar, sino que también analicé un poco sus palabras.

Me contó el porque le fascinaba la saga de Harry Potter, al parecer tenía todos los libros a excepción del que había aparecido en mi casa mágicamente, supuestamente era de el, que amable me dio su libro favorito solo porque si.

Después se quedó en silencio de golpe, quería preguntarle que pasaba, la garganta me picaba para que hablara pero no, me negué rotundamente, no tenia tiempo de lidiar con sus problemas.

Ay a quien engaño, si le pregunte, ¡aunque! No fue por preocupación, solo soy chismoso y listo.

Bueno, su respuesta fue básicamente un "que te importa, métete en tus asuntos" irónico si me lo preguntan.

Solo dijo: "vaya, no sabia que hablabas" ¿QUEEEEEEE? ¿NO SABIA QUE HABLABAS? ¿que le pasa a ese mocoso? Nadie me habla así, ni siquiera yo mismo, bueno, tal vez yo si me hable así, pero no es lo mismo, en fin, eso me pasa por ser tan buena persona.

No niego que si me pego en el ego, ¿no le importa que me preocupe por su salud? Me ofende de sobremanera, digo, si alguien me pregunta como me siento le voy a decir que se vaya derechito a pelar papas, pero en mi no aplica, así no son las cosas, después de eso solo me quedé callado todo el tiempo, él lo noto y se disculpo, pero ya para que, el mal ya esta hecho.

Salí de la escuela y él me siguió como siempre lo hacía, yo seguía molesto claro esta, pero no lo eche, si le decía que se fuera no me escucharía así que me ahorre mis valiosas palabras, en cuanto llegamos a mi casa se despidió y...

Ay por Dios, no estoy listo para asimilar esto de la mejor manera, pero me abrazo, rodeo mi cuerpo con sus brazos, sus delgados brazos que parece que en cualquier momento se romperán.

Se sintió cálido, bastante cálido, mi corazón latía rápido, incluso sentí como mi cara ardía, pero lo ignore, no significaba nada que justo él me abrazara, era como si cualquier otra persona lo hiciera.

Después de eso solo dio media vuelta y se marchó, sin emitir sonido alguno, solo se fue y me dejó ahí plantado como árbol en medio de la calle, observe su espalda hasta que desapareció de mi campo de visión y como si me hubieran vuelto a conectar corrí desesperado a mi cuarto.

Ave Maria, esto no podía estar pasando, Caleb me había abrazado, y se había sentido cálido, y lindo, y correcto, y perfecto, y me estoy volviendo completamente loco.

No importa, no importa, no importa.

No significa nada, él sigue siendo el mismo niño mimado que me desagrada.

Chris.