Prologo

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Era una noche lúgubre, la luna estaba en su mas grande esplendor.
Estaba completa, luciendo aun mas hermosa
Los copos de nieve que caían en picado hacia los techos de las casas del pueblo dejándolas completamente blancas en conjunto con el suelo.

Esto le daba un ambiente muy cálido, casi nostálgico.

En otro lado, mas específicamente en el castillo de este pueblo cuyo nombre es Invernalia se encontraba una mujer en el labor de parto por su 2 hija.

Gritos

Gritos

Gritos y mas gritos era lo único que se escuchaba al otro lado de la enorme puerta marrón con pequeños trozos de plata decorando esta.
Solo se podía ver a las mucamas de un lado al otro, todas nerviosas puesto que la próxima hija de el señor de Invernalia iba a nacer.







Uno, dos, tres, cuatro....

Uno, dos, tres, cuatro....

Uno, dos, tres, cuatro....
Al otro lado de la enorme puerta se encontraba el Lord dando vueltas al largo y frio pasillo junto a sus otros dos hijos mayores; el pequeño Robb Stark de 3 años y el pequeño Jon nieve de 2.

Se escuchaban cada vez mas gritos poniendo mas nerviosos a los tres hombres en aquel lúgubre pasillo, tanto que el lord de Invernalia quiso entrar haber en que estado se encontraba su mujer.
Se encontraba en una lucha con una mucama cuando sorprendentemente los gritos cesaron dando paso a un abrumador silencio.

Nada

Eso era lo que se escuchaba absolutamente nada.
Hasta que de un momento a otro la nieve empezó a caer mas rápido golpeando furiosamente contra las ventanas y haciendo ruido.

Hasta que de un momento a otro un llanto inundo la sala y los gritos siguieron rebotando por todo el castillo.
Después de 10 minutos el ultimo grito sonó y con ello la nieve disminuyo su furor.
En eso se abrió la puerta dando paso al lord, quien hace unos segundos había dejado atrás a la mucama y a sus dos hijos pequeños al mando de esta.

Al entrar a la habitación lo único que pudo hacer el lord fue sorprenderse puesto que no solo había una niña como le habían comentado si no que en las manos de su exhausta esposa reposaban dos.

Rápidamente se hinco de rodillas junto a la cama y abrazo suavemente a su mujer mientras repartía besos en su sudorosa frente.

Miro a su primera hija la cual estaba en los brazos de su mujer y no paraba de llorar, tenia unos pequeños cabellos de color naranja y unos hermosos ojos del color del mar, los cuales robarían mas de un suspiro de algún príncipe, si, de eso estaba completamente seguro.

Agarro a su segunda niña y la miro fijamente, tenia mucho pelo de un color tostado, al de segundos dejo de fijarse en su pelo para dirigirse a sus ojitos los cuales ya estaban abiertos dejando ver un iris de color marrón con destellos dorados.

Cuando el lord quiso tocarle la mejilla, la pequeña bebe le cojio el dedo y empezó a reír.
Aquella niña lo cautivo simplemente riendo, dejando a un lord encantado con su segunda hija, perdidamente enamorado de su amplia sonrisa y su alegre risa.

Poco después los dos niños pudieron pasar a ver a su hermana y sorprendiéndose tanto como su padre al verlas puesto que no era una si no que eran dos.
Al igual que a todos quedaron encantados con la pequeña contagiándose de su escandalosa risa.

Poco después la noticia de que lady Stark no solo había traído al mundo a una niña si no que trajo a dos al mundo se expandió por todos lados llegando así a la capital.
Dejando a la Reina Cersei un amargo sabor en la boca.

Y para la mañana siguiente todo el mundo sabia el nombre de Sansa y Elisabeth Stark las mellizas y princesas de Invernalia.

























644 palabras.

𝖂𝖔𝖑𝖋𝖘 "𝕵𝖚𝖊𝖌𝖔 𝖉𝖊 𝕿𝖗𝖔𝖓𝖔𝖘"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora