𝐆𝐚𝐭𝐢𝐭𝐨 (𝚂𝚑𝚒𝚗 𝚂𝚘𝚞𝚔𝚘𝚔𝚞)

CAPITULO 5

El castaño estaba "cuidando" al azabache mientras Atsushi había salido a hacer una entrega.

-¡miaaau!

-guarda silencio, no me dejas dormir- se quejó

-Dazai, si no vaz a hacer tú trabajo, al menos cuídalo bien- ordenó el rubio

-eso hago, pero no sé calla, talvez si le doy algo para dormir se calle

-¡Dazai!- gritaron algunos -¿Como puedes ser tan cruel?- mencionaron con molestia. Con el pasar de los días se había encariñado lo suficientemente con el minino

-no los entiendo, primero lo odiaban y ahora lo defienden- se quejó

Pasaron al menos dos horas hasta que el albino regreso, y en todo ese tiempo no dejo de maullar hasta poco antes de que el albino regresará. Pues fue cuando la agencia se llenó de trabajo y Dazai se durmió.

-¡hola! ya volví

-hola Atsushi- saludaron

-¿donde está?

-creo que estaba con Dazai- contesto Tanizaki

-okey..iré a verlo

Pero la sorpresa fue que cuando se dirigió a verlo, ya no estaba.

-¡Desapareció!

-¡¿desapareció!?

-¡waaa!, ¡me van a matar los de la Port mafia!

-¿porque gritan?- se quejó el castaño

-¡Dazai!, Se supone que tú lo vigilarias

-ugh..- hizo una mueca

Y justo en ese momento el castaño dejo de ser controlado quedado confundido recuperando el poco brillo en sus ojos.

-¿¡Hah?!, ¡¿que sucedió!?

-¿Da-Dazai?- ladeo la cabeza el albino

-¡porfin soy libre!

-Dazai, ¿de que hablas..?

-esperen, lo último que recuerdo es que...¡¡Ah!!- grito exaltado -No me digan que lo hice, ¡díganme que no!

-Dazai..

-¡es imposible!

-Dazai...

-¡¿como fue posible que mi habilidad fallara!?

-¡¡Dazai!!- gritaron todos

-¿Eh?

-¿podrías explicarnos de que hablas?

-a-ah..si, claro

Se acomodo en el sofá comenzando a relatar todo lo sucedido desde que fue la pequeña pelea en aquel callejón hasta lo último que recuerda haberle hecho a Ryunosuke.

-a-asi que l-lo...- tragaron saliva

-¡no era mi intención!, Me estaban controlando..- menciono con la voz quebrada

-bueno eso es entendible, después le explicaremos todo si es que regresa a la normalidad o lo encontramos- dijo el de lentes

-es cierto, ¡se escapo!

-¡¿que!?

-se supone que quien sea que te estuviera controlando, lo tenía que cuidar, ¡Pero solo se escapo!- dijo el albino

-¿pues que esperamos,? ¡avisemos a la Port mafia, y busquemoslo!- respondió el Castaño

-¡bien!

...