Estaba sentada tranquilamente en un mueble en el patio cuando ella retira bruscamente el libro de mis manos y se queda mirándome fijamente con los ojos entrecerrados
- ¿Qué? ──Le pregunte── Solo leía
- Solo leía ──Se burla── El otro lado del sexo
Lee el título de la portada
- Estaba aburrida y pues... Era lo que había ──Justifique──
- No es la primera vez __ ──Me tira una mirada amenazante── El otro día estabas leyendo, el límite del placer, también cartas eróticas.
Suelto una fuerte carcajada y ella queda asombrada
- ¿Y cuál es el problema? ──Pregunte, pero ella lo toma algo ofendida──
- Eso dice que eres muy, pero muy hormonal ──Lanza el libro a la mesa que tenía al lado── Tu lees y lees, pero no practicas eso en mi
Yo hago una mueca de asombro
- ¿Quién es la hormonal ahora? ──Jugueteo y ella frunce su ceño──
- Yo solo digo ──Alza sus hombros y se sienta en mi regazo── Te ves muy bien con lentes, te ves inocente
- Mientras me ves inocente, estos lentes han leído más de 20 libros eróticos ──Ella suelta una fuerte carcajada── No da risa
- Si lo es ──Ella para de reír y retira mis lentes con sumo cuidado, para después colocárselos ella──
- ¡Qué tierna! ──Suelto un chillido y ella se sonroja── Kendall sonrojada
- Soy una piedra ──Hace una pose fuerte──
- Conmigo no lo eres ──Pose mis manos en sus piernas──
Nos habíamos quedado en completo silencio, solo nos mirábamos.
- Así que... 20 Libros ¿No? ──Comentó──
Yo llevaba una camisa blanca holgada ese momento
- Son bastante ──Continuó, mientras comenzaba a jugar con el cuello de la camisa──
Comenzó a desabrochar botón por botón, pero con bastante lentitud
- Lo mejor esta en el libro ──Musite, prestando bastante atención a cada acción que hacia──
- Me encantaría leer uno de esos ──Me miro completamente a los ojos, su pelo se movía gracias al viento──
Ya había desabrochado toda mi camisa, mientras ella tenia un top de botones. Mis manos paseaban de sus piernas a su abdomen, ambas sonreíamos ante esto. Yo estaba en completamente silencio, al igual que ella, de fondo se escuchaban los pájaros cantar y el agua de la piscina moverse por aquel viento.
- ¿Algo más que decir ahora? ──Me da la palabra──
Me miraba con una sonrisa de oreja a oreja. Se acerca y me regala un par de besos cortos, mis manos la agarraba con fuerza de su definida cintura, ella me jala hacia su cuerpo y retira fugazmente mi camisa quedando en sujetador. Baje mi mirada a sus pechos y tras la tela se notaba sus pezones erecto, y sin avisar le quito aquel top dejando sus pechos al aire. Ella me da una sonrisa placentera.
Arquea su espalda para tener mas acceso a su cuerpo, fui repartiendo besos en su abdomen y los fui subiendo hacia su cuello.
Me acerco a su oído
- El orgasmo es el gran comedor de palabras. Sólo permite el gemido, el aullido, la expresión infrahumana, pero no la palabra ──Termino de hablar y muerdo el ovulo de su oreja, haciendo que suelte un fuerte jadeo── Exactamente...
No soy buena en el smut, tercer aviso xugdvifaejhbfvogaeir
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