Agresivo [MinSung]

Seven

🐿🐇

Minho estaba furioso, sus fuertes y grandes manos se cerraban con fuerza alrededor del volante del coche. Había ido a la casa de los Han en busca de Jisung, y había quedado como un imbécil cuando Cheol le había dicho animado que Jisung estaba con sus amigos.

Por un segundo, Minho quiso gruñir y darle un golpe al capó del coche, pero no lo hizo. Nayeon le había dicho que no sabía dónde estaba, pero que llamaría a Jisung para avisarle de que Minho se iba y le mandaba un amistoso saludo.

Amistoso saludo le daría él en la fiesta, cuando matara a puñetazos al primero que se le cruzase.

Lucas iba a su lado, y aunque la fiesta ya estaba montada y festejándose en su casa, Lucas acompañó a Minho a recoger a Jisung. Ellos eran amigos muy cercanos, eran como hermanos de diferente sangre y madre.

Él conocía a Minho, y conocía muy bien lo que era capaz de hacer.

"Minho vamos, deja al chico" aconsejó Lucas, algo nervioso por el hecho de que veía los nudillos de Minho blancos de tanto apretar el volante "Deja que Jisung se divierta, el chico apenas sale con sus amigos. Siempre va a las fiestas que tú le dices y nunca se ha quejado, no seas así"

"Él es mi maldito novio, y él tiene que venir a donde yo voy" farfulló el rizado, su mirada clavada en la carretera mientras conducía bruscamente. Lucas se tambaleó cuando el auto dio un giro brusco al cambiar de calle, Minho gruñó "Y si yo le digo que no lo quiero cerca de Eric, me obedece"

"Él no es un perro que te sigue a todas partes, Lee, es un humano. Y sí, es tu novio, mayor respeto tendrías que darle" contestó Lucas con el ceño fruncido.

"¡Oh! ¿Y ahora sugieres que serías mejor novio que yo?" se rió amargo, relamiéndose los labios con enfado.

"Eres un saco de mierda cuando te enfadas, ¿lo sabes?" negó Lucas "Pero, ya que insistes tanto con el puto tema, sí, probablemente yo sería mejor novio que tú"

Minho frenó el auto en seco, haciendo tambalear hacia delante a su amigo que iba de copiloto. Minho sacó sus manos del volante y agarró del cuello de la camisa de cuadros a Lucas. El pelinegro lo miró sorprendido, casi encogiéndose en su lugar.

Minho mantenía su mandíbula tensa, sus ojos verdes se veían amenazantes y filosos, y sus dientes apretados amenazaban con abrirse en cualquier momento y atacar hasta destrozar su cuello de un mordisco.

Parecía una maldita bestia.

"Escúchame bien, Lucas" farfulló con ira el rizado, su puños cerrándose dolorosamente en el cuello de la camiseta. Lucas lo miró en silencio, tratando de no temblar "Eres mi amigo, sí, pero jamás trates de meterte entre Jisung y yo. Porque como lo hagas, Lucas, créeme que olvidaré que somos amigos y te haré la maldita vida imposible. Si mi chico me llega a decir algo por alguna mierda que le has metido en la cabeza, simplemente te mataré. ¿Me has oído?"

Los ojos del pelinegro lo miraban con asombro y desconcierto, él jamás había visto a Minho así. No sabía que Minho era así, que cuando el capitán de futbol americano de la Universidad se enfadaba era así.

El rizado lo estampó bruscamente contra la ventana del auto cerrado "¿¡He sido claro o no!?"

Lucas titubeó "Sí, Minho..."

Cuando Minho lo soltó de la misma manera brusca, Lucas se tambaleó de nuevo. Habían llegado a la casa de Eric, vio, por eso Minho había parado tan bruscamente de un momento a otro.

No trató de nuevo de tranquilizar a su amigo cuando Minho salió del auto y cerró la puerta con ira y fuerza innecesaria. Lucas juraba que estaba rojo de la ira, y que sus dientes se iban a partir de tanta tensión en su mandíbula definida.