ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ❛ 𝐂𝐨𝐥𝐝. ¡!~
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Un pequeño resfriado, en un pequeño cuerpo, Dong Sicheng se había destapado la noche anterior que su novio no llegó a casa por estar de viaje ¿Cómo reaccionará Yuta al ver a su temblante novio con...
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Sicheng despertó estornudando, Yuta estaba a su lado abrazando a su noviecito mientras este intentaba volver a conciliar el sueño.
— ¿No te enfermaste? — Sicheng le hablaba a su novio, ya que la noche anterior, Yuta lo había besado repetidas veces.
— No, soy fuerte, por eso siempre te estoy diciendo que te pongas calcetines y que duermas abrigado — beso su esponjosa mejilla mientras seguí en sus brazos.
— Yuta... quiero una paleta — se le acababa de antojar algo dulce.
— Claro, ya vuelvo — lo dejó suavemente recostado sobre la cama y salió a la cocina en busca de las paletas favoritas de Sicheng.
Yuta estaba pensando en hacerle una "prueba" a Sicheng, Yuta siempre le compraba sus caprichos, sus peluches, ropa, comida, todo lo que Sicheng quisiese, Yuta se lo compraba, pero ¿Y si Sicheng está a su lado por simple conveniencia? No lo creía, no, pero sería una pequeña broma lo que haría en unas horas.
— Aquí está, amor — Yuta le trajo 3 paletas de fresa, sandía y limón, Sicheng sonrió tomándolas agradeciéndole en el acto.
— Te amo — aún con su nariz tapada, sonrió y habló con firmeza aquellas palabras.
La paleta era dulce y roja, era deliciosa, pero antes de que pueda metérsela a su boca, Yuta se la arrebató.
— ¡Hey!
— Primero tu medicina — al igual que el día anterior, le entregó un té caliente de manzanilla con 30 gotas de propóleo.
— ¡Pero no me gusta! — pataleó agitando sus manos y piernas.
— ¿Quieres que te den una inyección entonces? — dejó la taza en la mesita de noche que estaba a la derecha de Sicheng, sentándose a su lado.
— No...
— Entonces toma la medicina, vamos, te curarás pronto — al ver que Sicheng no respondía, trató de otra forma — si no lo haces, me comeré tu paleta — amenazó con meterse la roja paleta a la boca.
— No me importa, puedo quitártela y comérmela yo — abultó sus labios.
— Bueeeeno — y ahora esa paleta estaba en su boca — toma la medicina — habló con un tono más serio.
