Del odio al amor hay un solo paso || Tom Marvolo Riddle || (+18)

Capitulo seis

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¿Preparados?
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Al fin sábado todos estábamos empacando nuestras pertenencias ya que hoy nos iríamos.

Terminamos de empezar y nos dirigimos a la estación, donde me encontré a los demás chicos.

—¿Entonces tu nos irás a recoger a nuestra casa a todos en la tarde?— Pregunto Blaise

—Exacto, así que preparen sus maletas rápido porque iré pronto— Dije sonriendo y todos asintieron.

—¿Y en que nos irás a traer?— Pregunto Draco con burla.

—Ya verás, ya verás—

* * * *

Me baje del tren y allí estaba mi papá.

—Papi— Corrí hacia el y lo abracé.

—Hola mi princesa— Dijo y me dió un beso en la frente.

—Mira papi, ella es Pansy— Dije presentandosela pero ella estaba embobada viéndolo.

—Un placer señorita Parkinson— Dijo mi papá extendiéndole la mano pero ella estaba en un trance.

—Yo... Lo siento, Pansy Parkinson— Dijo y estrecharon sus manos.

—Okeyyyy...— Dije dudando.

—Y mi mami papi?— Pregunté.

—Ya sabes trabajando— Asentí —Bueno, vamos a la camioneta chicas e iremos a la casa hija para que vayas a traer ropa— Dijo subiendo nuestras maletas al baúl de la camioneta.

Nos metimos a la camioneta, y unos minutos después mi papá hizo lo mismo.

Media hora después llegamos a la casa, mi papá aparco el auto y nos bajamos.

—Bueno Pansy te presento mi humilde hogar— Dije mostrándole mi casa.

—Oh my god— Dijo admirando la casa —De humilde no tiene nada pero bueno— Dijo tragando saliva.

—Y eso que no has visto la del mundo mágico— Le susurré y abrió más sus ojos.

Mi papá bajo las maletas del auto y se acercó a nosotras.

—Hija, yo tengo que ir a otro lugar, ten— Me dió un maletín —En la cochera está el auto maneja con cuidado y no quemes la casa— Me dió un beso en la mejilla —Te amo mi niña, un placer señorita Parkinson.

—Te amo más— Dije y mire cómo mi padre se iba en la camioneta —Bien, entremos— Ambas entramos a la casa con las maletas.

—Tu papá me cae bien— Dijo Pansy.

—Lo se es un amor— Dije suspirando.

Pansy no dejaba de ver la casa, admirando todo.

—Que sucede— Pregunté

—Amiga te tengo envidia— Dijo y las dos reímos.

—Tengo hambre, ¿Que quieres comer?

—Algo muggle, algo rico— Dijo pensando.

—Okey, deja que lo pido a domicilio— Dije marcando con el teléfono de la casa.

Luego de pedir la comida subimos a mi habitación, la verdad ya extrañaba.

—Ay ____, tienes todos los recuerdos con nosotros— Dijo viendo las fotos en la pared.

—Claro, son mis mejores amigos— Dije sentándome en mi cama.