Only Shindong

Viaje juntos

Narra TN

Todo el paisaje era precioso, valles verdes llenos de árboles, además la carretera estaba muy vacia lo que ayudaba a apreciar mejor el lugar. Llevamos viajando un par de horas y yo me siento en las nubes, no hay un lugar mejor en el que quiera estar en este momento.

Dejé de mirar por la ventana y miré a mí hermoso hombre, Shindong Hee, me quedé hipnotizada por su belleza, lindos ojos, labios suaves, bonita sonresa y una gran personalidad. Me perdí en él hasta que me tomó de la mano mientras seguia conduciendo.

Shindong: Si me sigues viendo así cariño, podríamos tener un accidente, me haces sentir nervioso

TN: Es que para mí eres perfecto, no quisiera estar con nadie más en este momento

Me dedicó una de sus hermosas sonrisas y siguió conduciendo, un par de horas más tarde llegamos a nuestro destino, era un pequeño pueblo alejado de le ciudad, tenía mucho carácter y era encantador. Shin condujo hasta que llegamos a unas cabañas de madera.
Estacionó el auto y me ayudó a salir de él, me tomó de la cintura y me abrazó tiernamente.

Shindong: Y bien cariño, qué te parece nuestro hospedaje? (Dijo mirándome directamente)

TN: Esta cabaña es nuestro hospedaje?

Shindong: Sí, porque nena, no te gusta?

TN: Gustarme? ME ENCANTA!!

Shindong: Bien entonces que te parece si entramos?

Me tomó de la mano y lentamente me guío dentro y al ver el interior de la casa me asombré mucho, era muy linda, tenía un gran sofa frente a la chimenea, además de una prqueña cocina y a un lado estaba la habitación dónde había una gran cama, además el baño tenía una tina y una regadera, sin duda era perfecto para alejarnos del ambiente fe la cuidad.

Después de bajar el equipaje tomamos una relajante ducha y salimos a conocer los alrrededores. Cada vez me gustaba más la idea de este viaje, el pueblito era muy mágico, paseamos por muchos lugares y compramos un par de recuerdos y cuando se hizo más tarde fuimos a comer a un pequeño pero muy lindo restaurante. Nos sentamos y empezamos a platicar.

TN: Wow, de verdad cada vez me gusta más este viaje sin duda te luciste cielo

Shindong: Gracias nena, no sabés cuánto necesitaba este tiempo a tú lado, hemos tenido unos meses de locura y te extrañaba montones

Seguimos cenando y salimos rumbo a la cabaña, botamos todas las cosas que compramos y nos sentamos enfrente de la chimenea acurrucandonos mientras sentiamos que la habitación se iba calentando. Charlamos un rato más y nos fuimos a dormir.

Al día siguiente todo iba bien, desayunamos y salimos a seguir conociendo y ya en la tarde regresamos a la cabaña y me metí a bañar, pero Shin no quiso venir, fué algo poco común pero no le dí mucha importancia. Cuándo estaba secando mí cabello olí una fragancia de vainilla que era realmente embriagadora; intrigada abrí la puerta del baño para encontrarme con las luces apagadas y la chimenea encendida además de un corazón de petalos de rosa en la cama.

Miré buscando a Shin hasta que lo siento tomarme de la cintura pegandome a su creciente erección, se acercó a mí cuello y después de mordisquearlo un poco me habló al oído con voz ronca.

Shindong: Está noche te prometo que harás de todo excepto contradecirme