Tus Tatuajes

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Narra TN

Eran las 11 am y sonó la campana de la escuela indicándonos que debíamos ir a la siguiente clase, así que tomé mí mochila y salí del aula caminando tranquilamente mientras miraba todo a mí alrrededor buscando a alguien.

Tardé un par de minutos hasta encontrar a Shindong un compañero de clase, desde que entré a esta escuela él me atrajó enseguida, siempre lleva lentes y el cabello muy bien peinado, además usa su ropa tres tallas más grandes cosa que lo hace ver cómo la persona más adorable de este planeta y además es muy inteligente siempre es el mejor de la clase, sin duda Shindong es todo lo que busco en un chico.

Pero que se fije en mí es sólo una ilusión ya que a pesar de llevarnos bien y ser amigos, estoy segura de que nunca me vería cómo algo más siempre que le pregunto si hay alguien especial desvía mí atención a otra cosa, supongo que tal vez no me tiene tanta confianza cómo para confesar de quién se trata; pero sin duda ella será una chica con suerte.

Llegué al salón de clases y me senté, abrí mí mochila para sacar mis libros y de pronto percibo un aroma dulce a vainilla y sin tener que mirar a aquella persona que se había sentado a mí lado yo estaba segura de qué se trataba de Shin, podría reconocer aquel aroma tan exquisito en cualquier lugar.

Shindong: Hola TN

TN: Hola

Shindong: Supiste lo del proyecto final?

TN: No, qué es?

El iba a responderme sin embargo el maestro entró y tuvimos que dejar nuestra charla para más tarde. Pasó media hora y yo no sabía a que prestarle atención si al maestro que estaba explicando el tema o a Shindong que se mordía los labios mientras trataba de comprender todo lo que el profesor decía.

Por un momento me perdí en aquellos labios rosados que estaban tan cerca de mí, tan cerca que casi sentía que los tocaba sentí que podía besarlos y maltratarlos a mí antojo. Mí mente divagó por unos minutos hasta que ví a Shindong mirándome con una sonrisa en el rostro mientras me decía lo que el había entendido del tema.

Sacudí mí cabeza alejando aquellas fantasías y me puse a trabajar, ambos terminamos y después de que el maestro nos revisara los apuntes la campana sonó una vez más indicándonos el cambio de clase.

Tomamos nuestras cosas y caminamos juntos por el pasillo de la escuela rumbo a la última clase de hoy, deportes. Aquella era una clase que a ninguno de los dos nos gustaba ya que siempre los populares del salón trataban de impresionar a los demás pero era una clase obligatoria así que tenemos que cumplir.

Llegamos al patio y la maestra nos recibió con el ánimo de siempre, parecía que no sabía hablar en un tono normal siempre se la pasaba gritandonos. Hoy el ejercicio eran carreras de circuitos con relevos.

La maestra nos dividió en equipos de dos hombres y una mujer para hacerlos equitativos, elegimos el orden en el que íbamos a competir y cuándo la maestra hizo sonar el silbato comenzamos de uno en uno.

Primero había que arrastrarse pecho tierra y llegar al primer cono, después debíamos meternos en un costal y saltar hasta la línea, continuabamos el recorrido escalando una pared inclinada y por último era hacer diez lagartijas y quién lo hiciera más rápido podría salir de la clase pero los que quedaran al último tendían que alzar todo el equipo que se usó.

Fuimos pasando de uno en uno y el equipo de Shindong y el mío fueron los últimos en llegar así que la maestra dió por concluida la clase y de los equipos que quedaron últimos jugamos piedra, papel o tijera para definir al que se quedaría a recoger todo; y los perdedores fuimos Shindong y yo.

Todos se fueron dejándonos completamente solos a ambos, nos miramos y nos quedamos así un momento hasta que recordamos cuál era nuestro trabajo allí.

Shindong: Lista para empezar?

TN: La verdad no, pero quiero irme a casa hoy

Shindong: Entonces hagámoslo, fighting!!! (Dijo animado)

Nos tomó cerca de cuarenta minutos limpiar y guardar los equipos, ya sólo restaba uno que era el más pesado así que lo cargamos entre los dos y lo llevamos a su lugar y al alejarnos pude ver que la playera de Shindong etstaba más que sucia, antes era de color blanco y ahora parecía ser muy obscura.

Comencé a reírme y Shin me miró confuso, sin duda no se había dado cuenta de lo que le había pasado.

TN: No te has dado cuenta?

Shindong: De que?

TN: Tú playera está un poquito sucia

Miró hacía abajo y su cara de asombro no tiene precio, aquella expresión hizo que diera aún más risa y Shin me miró unos segundos y después se reía conmigo.

Shindong: Tienes razón sólo está un poco sucia, pero creo que es mejor que me la quite me puedes pasar mí sudadera por favor?

TN: Claro

Fuí por su sudadera y cuándo regresé me encontré con un Shindong que jamás esperé ver, tenía el torso totalmente expuesto ya que se había quitado la playera y en su piel blanca resaltaban dos tatuajes, uno en la espalda que era la cara de un león y el otro en el brazo era una mujer con una frase debajo.

Me quedé impactada ante aquella imagen, Shin siempre había sido muy reservado en cuánto a su cuerpo y nunca me imaginé que tuviera aquellas obras de arte. En ese momento él se percató de mi presencia y se giró mirándome al principio apenado pero después su mirada cambió.

Shindong: Si vas a decir algo respecto a los tatuajes, mejor ahorratelo TN, me gustan y pienso hacerme más, no necesito a otra persona que me juzgue por tenerlos...

TN: No me conoces Shin? Yo no te juzgo, sólo me sorprende que tengas tinta en tú cuerpo y que no me lo hallas dicho pero no te reclamaré nada porque a decir verdad te vez muy bien con ambos tatuajes

Shindong: Perdón TN creí que serías de esas personas que me critican por ellos; de verdad crees que se ven bien?

TN: Claro que sí, puedo tocarlos?

No me contestó nada pero caminó hasta mí, tomó mí mano y la llevó a su espalda, comencé a tocar levemente su piel que era muy suave y sentí cómo se estremeció ante mí toque. Seguí el contorno de toda la figura y la grabé en mi mente ya que tal vez nunca volvería a verla e hice lo mismo con el tatuaje del brazo.

Cuándo sentí que había sido suficiente alejé mí mano pero Shin me tomó por sorpresa llevándome a la pared más cercana y acorralandome con sus brazos uno a cada lado de mí cabeza haciéndome imposible escapar, aunque siendo sinceros no quería salir de allí.

Me quedé en shock y Shin aprovechó para meter su cara en el hueco de mí cuello y aspirar mí aroma de forma lenta y muy placentera.

Shindong: Siempre que quieras puedes volver a tocar mis tatuajes y sabés porqué?

Negué con la cabeza totalmente embriagada por las sensaciones que me producía estar así de cerca con Shin.

Shindong: Porque ya fué suficiente de esconderme, quiero ser tú novio y que tú seas mía, quiero ser más que un amigo que está a tú lado en las clases, quiero conocer todo de tí y enamorarme cada día más, TN te gustaría ser mí chica?

Mí cabeza se volvió loca, acaso estaba soñando? De verdad era Shindong? Mí crush desde hace años se me estaba declarando y yo no podía responderle, las palabras se quedaron atoradas en mí garganta hasta que pude contestarle.

TN: Me.... Encantaría (Dije sonrojada)

Y ya no hubo más palabras de parte de ningúno de los dos ya que nuestros labios estaban ocupados en un beso que Shindong inició y que no queríamos que terminara, los minutos pasaron y cuándo debimos separarnos por aire ambos sonreímos.

Shin se acercó a mi oído y susurro con una voz grave.

Shindong: Vámonos de aquí nena, te demostraré cuánto te he deseado estos años....

Y una vez más lo miré perdiendome en sus ojos mientras me preguntaba, dónde había quedado ese chico nerd que era mí compañero?

Only ShindongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora