🦋Primera Vez🦋 {DraMi}

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- Kenchin, quiero follar.

Todo se habia jodido para Draken.

Desde que Mikey le habia dicho eso antes de despedirse, no podia pensar en nada mas.
Llego a su departamento cabizbajo, nisiquiera saludo a Masamichi, que lo quedo mirando extrañado desde el vestibulo.
Ignoro completamente a las chicas que le hablaron camino a su pieza.

Tenia la cabeza muy ocupada ahora; Mikey, su Mikey, queria sexo.

¿Como rayos tenian sexo los hombres?

Tenia una idea, pero no creia que funcionara.

Mikey era tan caprichoso que solto esa descarada frase fuera de contexto, sabiendo que Draken se esforzaria al maximo para cumplir todo lo que quisiera.
Pero tal vez esto le sobrepasaba.

Llevaban 4 meses de volver oficial su relacion, y ya ambos tenian 16 años.

¿Era muy pronto? No tenia idea, no tenia idea de nada. Habia normalizado tanto la sexualidad de su entorno, que no noto que en realidad no tenia idea de que era lo que se hacia normalmente en estas situaciones.
Y aparte, claro, eran hombres, todo lo que el sabia era sobre tener sexo con mujeres. Quizas sabia tanto sobre eso, que le habia dejado de interesar hace mucho tiempo.

¿Queria follar? Tal vez. Pero si lo hacia, queria hacerlo bien. No, debia ser mas que bien; queria dejar a Mikey agradeciendole por esforzarse tanto en cumplirle sus caprichos. Y pidiendo mas.

"Suplicando mas".

- Jeje... si, eso estaria bien.- murmuro pensativo, imaginar a Mikey rogandole para que lo complaciera le hacia sentir inmediatamente un calor subir desde su entrepierna.
Intento serenarse, no podia distraerse ahora, necesitaba pensar.

Ya llevaba mas de una hora tirado en su cama, mirando el techo y tratando de descubrir todas las respuestas.

Pero un sonido desde su puerta cerrada le distrajo:

- Eh... Ken ¿Estas ahi?

- ¿Viejo?

Era el señor Masamichi, que al parecer lo estaba llamando.

- Oi, chico, ven a mi oficina.- solto, antes de que se escucharan sus pasos alejandose de la puerta.

Draken mascullo en voz baja; era raro que le llamara a su oficina, y solian ser para tener conversaciones aburridas sobre los nuevos cambios de "personal" o alguna oferta de trabajo de pocas horas para ganar algo de dinero, ya sea haciendo aseo en las piezas o arreglando grifos.

"Espero que sea algun trabajo", penso distraido, "Asi invitaria a Mikey a comer a esa cafeteria donde hay hurones por todos lados".

Ultimamente el menor se habia obsesionado con esa cafeteria donde podias interactuar con animales, pero hasta ahora solo se quedaban mirando desde la vitrina a todos esos graciosos hurones jugueteando, ya que un maldito cafe alli costaba lo mismo que un riñon.

Cuando llego al recibidor del prostibulo, se dirigio hacia la oficina del dueño, que ya tenia la puerta entreabierta.

- ¿Que sucede viejo? ¿Tienes algun trabajo para mi?

- Toma asiento Ken.

Draken fruncio el ceño, la cara de Masamichi estaba seria, pero tenia un aire conciliador. Sospechoso.

- ¿Paso algo?.- tanteo el chico tatuado.

- Eso es lo que yo queria preguntarte. Hace tiempo no hablamos... ¿Como haz estado?