𝘽𝙡𝙤𝙤𝙙𝙮 𝙅𝙤𝙗｡*||ˢᵒᵒʲᵘⁿ

1; soluciones

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—¡Se-señor Kim! Hago un buen trabajo, siéndole sincero no entiendo porque me está despidiendo—apretó su puño hablándole decidido, el pelinegro no comprendía la posición que su jefe estaba tomando con él.

—Mira, Soobin—giró su silla y pasando la mano por su barbilla tocó su barba—Me gustan tus artículos, siendo honesto contigo, eres quien mejor realiza su trabajo y el que mejor lidera aquí—habló con decisión viendo los ojos firmes del alto que hace poco se había puesto de pie lanzando su silla.

—E-entonces señor Nam...

—Es la junta niño, la junta quiere que solo empleados con un título universitario trabajen para la compañía además de...

Se cortó así mismo, tensó su mandíbula al escuchar aquello.

—¿De qué?

Soltó un suspiro pareciéndole injusto lo que le habían informado hace poco los directores después de insistir en no cortar del trabajo a ese joven que le había dejado impresionado con la cantidad de artículos y evidencias que exponía en el diario y sitio web sobre políticos, la red de tráfico de sangre de Corea del sur hacia Japón y como era que los humanos seguían extinguiéndose gracias a los vampiros y su "solución" la cual solo los beneficiaba a ellos.

—El estatus económico en el que los empleados se mantienen.

Sintió sus ojos picar, ¿Cómo era que eso afectaba su eficiencia o su calidad en el trabajo?

—Tengo... buen estatus.

—Soobin, te echaron de tu apartamento la semana pasada.

Vio el piso con pena ya que él había sido quien lo fue a recoger en su auto en ese entonces para llevarlo a la casa de Beomgyu. No tenía nada.

Después de un gran silencio Namjoon observó como Soobin intentaba pensar en como solucionar su situación.

—Hicieron una oferta...—habló sin ilusión—Dijeron que podrían ofrecerte una plaza pero no sería fija, tampoco recibirías un salario.

—¿Por cuánto tiempo sería?—sin ánimos preguntó.

—... cuatro meses.

Siguió apretando con fuerza sus puños. Lanzando una sonrisa hacia el techo pensó en el montón de gastos que se le acumularían además que necesitaba luz e internet para poder trabajar, además no era una fijo que siguiera trabajanfo después de ese tiempo, ¿Cómo le haría sin un sueldo?

Negó sin tener otra opción.

—Gracias pero... no puedo aceptarla.

Asintió y apuntando algo en la parte trasera de su tarjeta de presentación se la extendió.

—Es una pésima oferta Bin, en verdad lo siento—se notaba que sus disculpas eran sinceras, se acercó y tomó la tarjeta con duda—Mandé tu currículum a algunos amigos, puedes llamar y averiguar para más información o asignar una entrevista, te atenderán con gusto.

—Gracias señor Kim... es muy amable—intentó sonreír pero solo pudo mostrar una mueca dejando a la luz apenas sus hoyuelos.