My Golden Boy

|•Bendito mar•|

Dicen que en el primer encuentro de una pareja que está destinada a ser, se siente una mezcla de sentimientos recorrer todo tu ser, y pues quizás así sientan los protagonistas de esta historia, o quizás no pero de qué tienes una impresión a primera vista la tienes.

Una hermosa playa cubierta por la noche, y alumbrada con pequeñas luces llamadas estrellas, y con un hermoso sol nocturno llamada luna, en dónde las olas rompen en la orilla, abrazando a la arena, y provocando el más hermoso sonido de un lugar tranquilo, una melodía que inspira paz.

Louis se encuentra ahí observando un punto en el horizonte que le dé las respuestas de su origen, quería saber sobre su madre, quería saber si seguía viva o si ya murió, quería saber dónde estaban sus restos para ir allá y llorarle, pero no podía tener nada de eso, solo tenía la incertidumbre de no saber nada, encima más la gente de ese pueblo, ni siquiera estaba enterada de su existencia, ni siquiera sabían que era hijo de Gilherme Tomlinson el hombre con más millones del condado, a él lo veían como un simple peón de esa hacienda no lo veían como el dueño de la misma. Todo porque nunca fue reconocido gracias a la maldad de la ahora ya difunta madrastra.

Entonces en ese lapso de pensamientos absurdos alguien lo abrazo, alguien pasó sus brazos por su abdomen, alguien le brindaba un calor que nunca había sentido, alguien con ese simple abrazo le emitía lo llamado hogar.

Entonces tomo las manos de aquel desconocido, al sentirlas millones de emociones recorrieron su alma, un simple toque causo un terremoto en su interior, sin más que esperar, giro para ver de quién se trataba, y lo vió ahí, tuvo el honor de mirar a un ángel, pues a sus ojos no podía ser menos, y desde ese mismo instante sintió que el hermoso chico de ojos verdes, que reflejaban pureza, y que dentro de ellos puedes ver la selva del Amazonas con todas sus especies incluidas, quienes son capaces de destruir, él sería su amor, su vida, su hogar.

"Disculpa, pensé que eras alguien más" dijo el encantador joven un tanto nervioso, ya que había confundido a su novio con ese extraño chico de mirada bonita.

"No te preocupes" respondió Louis, encantado con la belleza de aquel joven, y volvió a hablar, "con esta noche que irradia terror al ser tan densa, es difícil reconocer a alguien más, y disculpa que me meta pero que hace un jovencito a estás horas aquí" pregunto Louis con mucha curiosidad, y además moría por saber su nombre, aunque no se sentía digno de nombrarlo.

"Perdón pero es algo que no te incumbe, eres un desconocido, y si no te molesta prefiero estar solo" contesto reacio Harry.

"Claro, entiendo a mí también me gusta estar solo, en eso nos parecemos sabes, que te parece si espero contigo hasta que la persona por la cual esperas llegué, no quiero dejarte solo es peligroso" acotó Louis, no queriendo irse de ahí.

"Cómo ya te dije hace un momento quiero estar solo" dijo el joven sin cambiar de opinión.

"Está bien bello joven, disculpa si te cause alguna molestia, se que no soy digno de admirar tu belleza, pero antes de irme, podría saber a quién estás esperando" pregunto curioso el de ojos azules.

"Discúlpame pero no te conozco, así que no tengo que responder tu pregunta, por favor vete" contesto Harry, pensando que el joven castaño era un entrometido.

"Está bien no insisto más, te dejo solo, espero esa persona llegué ya, me despido, que está hermosa noche te cubra con su belleza, y que la recuerdes siempre así como yo lo haré, porque vine por respuestas a este lugar, pero obtuve algo mejor, y sabes que es" el chico negó, "pues que tuve la oportunidad de escuchar y ver a un ángel, y eso no se olvida nunca, adiós partecita de cielo, espero volver a verte antes que regreses al lugar a donde perteneces, a la misma patria celestial" y sin más Louis se fue dejando a Harry un tanto sorprendido, porque nadie le había hablado así, con tanto amor en su mirada, quizás solo su novio, pero el tampoco a utilizado esas palabras con el.

"Adiós pedacito de mar, porque esos cuarzos azules solo pueden pertenecer al piélago que cobija está playa" hablo Harry para si mismo, y entonces se sentó en la clara arena, a esperar a su novio.

Pasado una media hora llegó Dominic su novio, él se sentía un tanto enojado porque le hizo esperar en medio de los peligros de la noche, pero en ese tiempo de espera solo pudo pensar en el joven que conoció.

"Amor, disculpa por llegar tarde, es solo que se presentó un problema en marina" hablo Dominic, y se acercó para besar a Harry.

"No te preocupes, no estaba solo todo este tiempo" respondió Harry feliz de ver a Dominic, su amor por siempre.

"Está bien mi amor, ahora sí disfrutemos la hermosa vista, disfrutemos nuestro tiempo, disfrutemos de nuestro amor" expreso Dominic con tanto amor, porque eso es lo que sentía por el joven Styles, mucho amor que ni el tiempo lo borrará.

"Siempre" dijo Harry perdido en los brazos y caricias de su amado, aunque su inconsciente guardaba su más remoto deseo por unos ojos azules y una sonrisa aperlada.